En el cierre de campaña de los partidos políticos, durante la noche de este miércoles, Alberto Benegas Lynch, un miembro de La Libertad Avanza que lidera Javier Milei, pidió romper relaciones con el Vaticano.
En declaraciones radiales, salió a contestar el arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina, Jorge García Cuerva, quien manifestó su asombro, porque estamos “… en un momento en el que tratamos de pedir una Argentina unida… donde creo que tenemos que tender puentes, la cultura del encuentro que tanto trabaja el Santo Padre.
Además, aseguró que la figura del papa Francisco es un referente muy grande para la Iglesia. Más allá de quién sea, dijo que estamos convencidos de que acá también interviene el Espíritu Santo. “Es nuestro pastor, referente universal”. Por eso, aseguró que decir que “en nombre de mi religión católica uno piensa suspender las relaciones diplomáticas es, por lo menos, impactante”.
El arzobispo porteño afirmó: “Yo quisiera romper las relaciones con la inflación, con la marginalidad, con todas las situaciones que están generando tanto dolor entre los argentinos. Hay que buscar puntos de encuentro y de repente nos encontramos con una nueva grieta”.
“Que el Papa venga a la Argentina”
Consultado sobre si quería que Francisco visitara la Argentina, aseveró que el Pontífice tiene que encontrarse con el pueblo, que lo está esperando, sea quien sea el presidente. “Me encantaría que el papa Francisco venga a Argentina“, respondió.
Ante la pregunta de si fue verosímil el pedido de perdón hecho por Milei en el debate presidencial ante la pregunta del otro candidato y actual ministro de Economía, Sergio Massa, expresó que le resultó muy oportunista la pregunta y la respuesta. “Fue poner en el medio al Santo Padre cuando, en realidad, la agresión y la violencia hacia él ha seguido“, como quedó demostrado en este acto. García Cuerva agregó que lo que lo impresionó fue que la propuesta de Benegas Lynch, recibiera aplausos en nombre de la libertad: “Me impacta que podamos aplaudir romper relaciones, quebrar vínculos, dejar de tender puentes. Me asusta como argentino”.
Finalmente, sugirió no dejar el Evangelio en la puerta del cuarto oscuro, votar con los valores del Evangelio, pensando en la solidaridad y en los que más sufren. Cree que hay que vivir este proceso eleccionario con esperanza porque el país tiene que salir adelante. “Seamos cristianos a la hora de elegir”, aconsejó.
