El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, alerta de la “erosión” que la familia sufre “a veces por parte de la misma Iglesia con interpretaciones torcidas de la enseñanza de Cristo y con propuestas achicadas del amor humano”. Así lo escribe en su carta semanal con la vista puesta en este domingo, cuando se celebra la fiesta de la Sagrada Familia. Esta reflexión del prelado andaluz coincide con el debate abierto por la Declaración ‘Fiducia supplicans’ del Dicasterio para la Doctrina de la Fe que abre la puerta a la bendición de parejas “en situación irregular”, como los divorciados y los homosexuales. Eso sí, Fernández no hace referencia alguna directa a este documento vaticano.
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Eso sí, en su escrito también advierte de que la familia “sufre erosión por parte de los cristianos que no viven su matrimonio como Dios manda, ni han descubierto la hondura de un amor para siempre”. Este terceto de alertas lo completa con la “erosión tremenda por parte de la sociedad, de las leyes, de las costumbres que van introduciéndose”.
Ni tradicional ni progresista
“Enseguida nos dirán que ya estamos con la familia tradicional para oponerla a la familia moderna y progresista”, deja caer el obispo, que subraya que “la Santa Familia de Nazaret no es ni tradicional ni progresista, es la familia de Jesús que inspira la familia cristiana”. “Llamarla ‘tradicional’ es considerarla vieja y caduca, pasada de moda”, apostilla Fernández.
“Otras formas, que hoy quieren llamarse familia, no lo son. Ni responden al plan de Dios, ni son capaces de transmitir vida, ni son complementarias de los sexos masculino y femenino”, aclara en su escrito. De la misma manera, enfatiza que “tan viejo como el pecado es el adulterio, la infidelidad matrimonial y todo tipo de egoísmo que se cuela por las rendijas del corazón humano”.
Fidelidad hasta la muerte
Con estas denuncias sobre la mesa, Fernández presenta a la familia de Nazaret como “una propuesta de esperanza para todos”, en tanto que enseña que “es posible la fidelidad hasta la muerte, es posible la apertura a la vida para recibir los hijos que Dios quiera enviar, es posible vivir en armonía años y años para toda la vida”.
“¡Qué bonita es la familia cuando responde al plan de Dios!”, se congratula el obispo de Córdoba, que pone como ejemplo a los matrimonios que cumplen las bodas de plata y de oro “en fidelidad y en armonía”.
Para Demetrio Fernández, el secreto del amor en una pareja está por encima de la relación mutua: “Ni el hombre puede llenar el corazón de la mujer, por mucho que la quiera; ni la mujer puede llenar el corazón del hombre, por muy enamorada que esté”. “Jesucristo es la respuesta. Él se presenta como esposo, se ha entregado como esposo a su esposa, la Iglesia, y enseña a los esposos a amarse como él nos ama”, rubrica el obispo de Córdoba.
