Desde este 1º y hasta el 4 de junio, Puerto Rico recibe a las delegaciones nacionales que integran a las Cáritas de América Latina y el Caribe para celebrar su XX Congreso, bajo el tema ‘Cáritas sinodal, solidaria y fraterna; junto con los pobres renovamos la esperanza’.
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Francisco Hernández, secretario ejecutivo saliente, afirmó que “es muy importante la participación de toda nuestra red eclesial, porque buscamos que esta dinámica esté dentro del espíritu de la fase sinodal”.
El hilo conductor de este encuentro continental será la Asamblea Eclesial, un itinerario que “sigue avanzando para alimentar el actual camino sinodal” y “nos anime, nos entusiasme y nos ilumine”. Se realizará bajo la modalidad presencial y virtual.
Fortalecer principios y valores
José Luis Azuaje, presidente saliente y quien estuvo por 12 años dirigiendo a esta instancia, aseguró que “la Iglesia Católica está en un proceso de reforma, de aggiornamento, queriendo volver a las raíces novedosas marcadas por el Concilio Vaticano II”.
Por ello, resulta muy importante “caminar juntos fortaleciendo los principios y valores permanentes de la misericordia, la justicia, el amor y la paz” para “ayudar a todas las Cáritas de América Latina y el Caribe, a ponerse al día, actualizando y dando sustento”.
“La participación en el Congreso tiene que ser para nosotros un Kairós, un tiempo de gracia muy especial porque construimos el futuro en el servicio de la Iglesia a los más necesitados”, acotó.
Para estos días de jornada se han organizado en nueve comunidades de vida: Cáritas Joven, Sinodalidad ecológica, Populismo, polarización y nuevas amenazas a la democracia, Nuevas Economías y buen vivir, Derechos Humanos, Paz y Reconciliación, Hacia una sociedad de todas las edades y Comunidad de vida migración, refugio y trata.
Un punto de partida
Azuaje ha explicado que en este encuentro buscarán establecer líneas de acción pastoral que respondan a las urgentes demandas de la región como la pobreza, las injusticias, la mala praxis económica y política.
“Que nuestro Congreso sea un punto de partida para la novedad que implica un tiempo permanente de misión, de sentir lo humano como lo prioritario en el servicio caritativo, sin dejar de soñar nuevas realidades que implican una ecología integral, una opción preferencial por los pobres, una Iglesia sinodal, la participación protagónica y organizada de los laicos, el ímpetu transformador de la iglesia”, ha indicado.
Foto: Cáritas LAC
