Fallece José Haring, franciscano y obispo emérito de Limoeiro del Norte, en Brasil

Fue ordenado el 19 de enero de 2000 y estuvo en esta diócesis hasta su renuncia por límite de edad en 2017

Falleció José Haring a sus 83 años, franciscano y obispo emérito de Limoneiro del Norte, en el estado de Ceará, nordeste de Brasil, la mañana de Nochebuena. Así ha informado la conferencia de obispos de Brasil.



El prelado, de origen alemán, fue vicepresidente y presidente de la regional nordeste Nº. 1 del episcopado brasileño. Entre 2002 y 2017 fue responsable de las pastorales sociales de la región 1 del nordeste.

También en ese periodo fue presidente del Consejo Pastoral de Pescadores – pastoral del mar – desde esta instancia han señalado que Haring se caracterizó por “su presencia profética, vibrante y solidaria en la realización de la animación pastoral y en el servicio a las pescadoras y pescadores artesanales”.

Para ellos “su modelo ejemplar de convivencia fraterna sigue siendo una inspiración en nuestro trabajo pastoral diario, contribuyendo a la construcción del Reino y de la buena nueva”.

Sobre el obispo emérito

El obispo residía en Brasil, donde estudió filosofía y teología con la Orden de los Hermanos Menores de San Francisco. Fue ordenado sacerdote en 1967 y su ministerio lo desarrolló en el nordeste brasileño.

Ejerció como vicario cooperante, párroco y tutor, en João Pessoa; párroco y guardián del convento de Santo Antônio, en Aracaju .

Fue ordenado obispo de Limoeiro do Norte un 19 de enero de 2000 hasta su renuncia por límite de edad en 2017.

Corazón y ojos abiertos

Desde la Conferencia de obispos, de la región 1 del nordeste, han expresado sus condolencias. “Nos unimos a ustedes, a los familiares y amigos de Dom José y a todo el Pueblo de Dios de esta Iglesia Particular, en oración, para que se le conceda el descanso eterno”, ha dicho.

“Caminó por su tierra con los ojos abiertos, se dejó tocar por el hambre de las multitudes, las enfermedades de los hombres y mujeres, la exclusión de los leprosos, quiso tener la vista abierta en el Nordeste brasileño, del que hizo su patria”, añadió.

Destacaron que Haring “vio las urgencias y necesidades, tanto pastorales como para promover una vida plena”entre la feligresía de esta región sobre todo su atención a las periferias y a las realidades de los pueblos ante las sequías.

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