"Los creyentes – ministros oramos juntos como parte de una comunidad humana, para que, descubriendo el sentido de nuestra vocación profética, nos acompañemos y alentemos..."
"Pareciera ser una constante en la pedagogía de Dios: considerarnos, reconocernos. Lo hace con Samuel, Moisés, José, María, Pedro, María de Magdala, etc."