El director editorial de PPC señala la saturación de títulos como una dificultad
JOSÉ LUIS CELADA – FRAN OTERO | Luis Aranguren Gonzalo, director editorial de PPC, señala que las dificultades principales son la saturación de libros y de editoriales religiosas y ve una gran oportunidad para el sector en el mercado latinoamericano.
– ¿Cuáles son las dificultades más frecuentes que encuentra el libro religioso para hacerse un hueco en el mercado?
– En primer lugar, la saturación de libros y editoriales religiosas. Se publica mucho y posiblemente no hay demanda para tanta oferta. Por otro lado, este mercado religioso se circunscribe casi exclusivamente a la librería religiosa. En España no existe la cultura de encontrar buenos libros religiosos en las librerías generalistas y en las grandes superficies. Es más, la falta de cultura religiosa propicia que se confunda libro religioso con esoterismo o autoayuda. Falta conectar el libro religioso con las grandes preguntas y cuestiones que se plantea todo ser humano para vivir con sentido.
– La expansión latinoamericana, ¿soluciona o compensa los problemas con que se puede encontrar actualmente el libro religioso en España, o ya no es aquella “gallina de los huevos de oro”?
– Los pueblos latinoamericanos son más receptivos al libro religioso que el español. En este momento la V Conferencia de Aparecida abre nuevos caminos de profundización en los ámbitos catequéticos, pastorales y de espiritualidad encarnada que invitan a redoblar los esfuerzos y la creatividad a las editoriales católicas.
En el nº 2.756 de Vida Nueva.
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