Con una eucaristía al mediodía de este sábado, 5 de junio, han comenzado las celebraciones del VII Centenario de la Catedral de Palencia. Una celebración que ha estado presidida por el nuncio apostólico en España, Bernardito Cleopas Auza. Para el prelado, la celebración “es motivo de gratitud al Señor por la Iglesia en Palencia en sí, y por cuanto ella también ha contribuido en relación con las demás Iglesias particulares en España y en el mundo”.
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La casa de la comunidad
El nuncio ha recordado que en torno al templo se creó “la primera Universidad en España donde estudió y enseñó Santo Domingo de Guzmán. También recordó la vinculación al templo, entre otros, del “palentino misionero en Filipinas y protomártir de China, el dominico San Francisco Fernández de Capillas”, al beato Pedro de Dueñas o al mártir Francisco de Jesús. También la de san Rafael Arnaiz y san Manuel González, de quien recordó algunas de sus enseñanza.
Para el prelado, recordar este centenario “nos ofrece la oportunidad de considerar el misterio de la Iglesia en el que estamos inmersos por la misericordia que el Señor ha tenido para con cada uno de nosotros llamándonos a formar parte de ella”. “La Iglesia es expresión de la comunión personal de Dios Uno y Trino, que ha querido extender su comunión a los hombres a través del Hijo encarnado en el seno de la Virgen María”, añadió.
Obispos vinculados a Palencia
Junto al nuncio y una representación de la comunidad diocesana –debido a las restricciones sanitarias–han concelebrado con el nuncio en la “Bella desconocida” el obispo titular, Manuel Herrero; Ricardo Blázquez, cardenal Arzobispo de Valladolid que fue obispo de Palencia desde 1992 hasta 1995; el cardenal Aquilino Bocos; Fernando Valera, obispo de Zamora; Luis Ángel de las Heras, obispo de León; el palentino Manuel Sánchez Monge, obispo de Santander; José Ignacio Munilla, obispo de San Sebastián que fue obispo de Palencia desde 2006 hasta 2009; el palentino Luis Argüello,obispo auxiliar de Valladolid y Secretario General de la Conferencia Episcopal Española; Fidel Herráez, arzobispo emérito de Burgos; el misionero Nicolás Castellanos, obispo emérito de Palencia, y Javier del Río, obispo emérito de Tarija (Bolivia).
En sus palabras de agradecimiento, el obispo Herrero también ha recordado los santos vinculados a la Seo y pidió “al Señor que esta iglesia siga siendo la casa de todos, donde todos los bautizados tenemos un lugar un sitio, y una mesa y donde los no creyentes pueden acercarse para gozar de la belleza de esta catedral, trasunto de la belleza de Dios, siempre bueno, misericordioso y fiel”. Y pidió a la Iglesia en Palencia que sea “una Iglesia signo de la unidad con Dios y de los hombres entre sí, de discípulos y misioneros, alegre, misericordiada y misericordiosa, una Iglesia en salida, que lleve el gozo del Evangelio, una Iglesia que sea hogar, hospital de campaña, una iglesia que sea tienda del encuentro con Dios y los hombres, con las puertas abiertas para acoger a los más pobres y necesitados, los descartados de la sociedad, y compartir el gozo y la esperanza, la tristeza y la angustia alegrías de los hombres”.
