La Conferencia Española de Religiosos (CONFER) ya tiene su propia Oficina de Entornos Seguros para “avanzar en su compromiso con las víctimas de cualquier tipo de abuso y apoyar a las instituciones religiosas”. Así lo anunciaron el 27 de febrero los religiosos españoles, que buscan centrar sus esfuerzos en la prevención y reparación. La responsable es la primera directora general de las Consagradas del Regnum Christi, Gloria Rodríguez Díaz. Psicóloga, cuenta con más de veinte años de experiencia de acompañamiento humano y espiritual. Minutos después de conocerse la noticia, ‘Vida Nueva’ entrevista a esta laica consagrada para conocer más sobre este nuevo servicio.
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PREGUNTA.- Desembarca en la CONFER. ¿Cómo se enfrenta a este nuevo servicio encomendado?
RESPUESTA.- Noto compromiso por parte de las congregaciones, creo que hay mucho deseo de atender de forma diferente y de hacernos todos más sensibles a las necesidades de las víctimas y más conscientes de lo que han sufrido. Ahora se quiere atender mejor y las congregaciones, sobre todo las más pequeñas, quieren una oficina que les acompañe en la prevención, intervención y acompañamiento.
Me da un poco de vértigo porque es un terreno muy sagrado, porque cada sufrimiento lo es, y qué oportunidad tan grande de hacerlo distinto entre todos y contribuir a luchar contra el abuso que ha hecho sufrir a tanta gente. Cuando escuchas a alguna víctima, se te rompe el corazón de ver el dolor tan tremendo vivido por los abusos y por la falta de respuesta, en muchas ocasiones, de nuestra parte. Desde la CONFER tenemos una gran oportunidad, por eso me motiva y me impresiona esta tarea.
P.- Como primera directora general de las Consagradas del Regnum Christi ha vivido un periodo complejo por los abusos en la institución. ¿Qué puede aportar su caminar al resto de congregaciones?
R.- Lo primero es aprender a dejarse ayudar. Nosotros pasamos una etapa muy complicada por los abusos de nuestro fundador y de la cultura interna que había, pero para mí fue un regalo cómo la Iglesia nos ayudó. Por eso, cuando me llamaron no pude decir que no, porque a mi me abrieron todas las puertas que toqué en Roma para pedir consejo, orientación, ayuda… La Iglesia siempre estuvo ahí y me ayudó. Así que creo que el primer aprendizaje es pedir ayuda y dejarse ayudar.
Hay mucha gente de Iglesia y de fuera que tiene mucho que aportar y puede ayudarnos, por eso tenemos un proceso de conversión, de reconocer con humildad la gravedad de lo que hay dentro, sin olvidar los abusos de poder y de conciencia, cuyos casos apenas están empezando a salir y que creo que va a ir a más. Nosotros hemos reconocido con verdad la miseria que teníamos dentro.
De principio a fin
P.- Las congregaciones más grandes o que han tenido más casos ya saben andar, pero ¿toca ahora echar el resto por las más pequeñas?
R.- Nuestro trabajo va a ir más en este sentido, porque quienes han tenido más casos cuentan ya con estructuras, equipos… y las otras apenas están implantando protocolos o incluso enfrentándose ahora al primer caso y son quienes más perdidos están. Mi misión aquí es que cualquier superior que llame a la CONFER se encuentre con un acompañamiento de principio a fin. Estamos formando ahora un consejo de apoyo que me ayude en esta labor, cuyos miembros serán personal de congregaciones insertos en sus propias oficinas de entornos seguros. Ellos también asesorarán para con su experiencia poder ayudar a congregaciones pequeñas.
P.- La idea es que cualquier víctima que llame a las puertas de la CONFER se encuentre con una mano amiga, pero ¿hay estructura para escuchar a todos o se prevé algún tipo de derivación con asociaciones de víctimas u otros centros con los que la Iglesia cuenta?
R.- Lo que tenemos en mente es hacer equipo con el resto de instituciones de Iglesia. Para atención ya hay otros proyectos, igual que para emprender caminos de justicia restaurativa. La CONFER tiene vocación de establecer sinergias con todos aquellos, dentro y fuera de la Iglesia, que están colaborando en la atención a víctimas. Desde la CONFER creemos que nuestra principal labor va a ser hacer fluir hacia otros.
La CONFER tiene ya habilitado el correo escucha@confer.es para estar a disposición de las víctimas
