La Madre Francisca Rubatto ya es santa

La Santa dedicó su vida a la atención de los enfermos y de la niñez más vulnerable

Este domingo el papa Francisco canonizó a la religiosa Francisca Rubatto, fundadora de la Congregación de las Hermanas Capuchinas, con numerosas casas en América del Sur y África.



Se trata de la primera santa de Uruguay, que llegó al país desde su Italia natal, hace 130 años. Dedicó especialmente a la atención de los enfermos y a niños y jóvenes desprotegidos.

La canonización

Los eventos programados se realizaron desde este sábado 14, con una vigilia de oración en la parroquia San Roberto Belarmino, donde se encuentra la sede de la Casa General de la congregación.

Este domingo, en Roma, la celebración estuvo presidida por el Santo Padre. Durante la ceremonia, Marcello Semeraro, prefecto para la Congregación para las Causas de los Santos, presentó ante la asamblea, la figura de la Madre Francisca y la de los otros beatos que llegaron hoy a la plenitud de vida. Seguidamente, el Papa leyó el decreto de canonización que confirma la santidad de la religiosa.

Asimismo, en el ofertorio, el joven que sufrió un grave accidente de moto que le produjo lesiones craneales y hemorragias y fue sanado gracias a la intercesión de la Madre, presentó las reliquias de la santa.

Los preparativos en Uruguay

María Francisca de Jesús Rubatto nació en Italia en 1944. Desde su juventud se ocupó de una misión: amar a Dios y servir a los más pobres, de cualquier condición, privilegiando las periferas existenciales. 

Durante la madrugada, se abrieron las puertas del santuario de Belvedere. Allí pudo los fieles que se acercaron pudieron seguir la ceremonia en directo, a través de un par de pantallas.

Por la tarde, el obispo Luis Eduardo González, auxiliar de Montevideo, ofrecerá una misa de acción de gracias. Al finalizar se realizará un ágape fraterno y un acto con música.

 

Imagen: Vatican News
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