El Tribunal Regional de Traunstein, en Alemania, ha separado la demanda por daños y prejuicios contra los herederos de Benedicto XVI por la confusa situación legal que conlleva el hecho de ser Papa emérito. Estos hecho están ligados al resarcimiento de daños ligado a una causa civil de condena por abusos sexuales contra un sacerdote vinculado al Arzobispado de Múnich y Freising, del que Ratzinger era el prelado.
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En búsqueda de los herederos
En concreto, esta víctima reclamaba 300.000 euros por daños y perjuicios al arzobispado, así como otros 50.000 euros a los herederos del que fuera el Papa emérito, según recoge Europa Press citando a Katholisch. Debido a la confusa sucesión legal del Papa alemán fallecido en diciembre, la demanda dirigida inicialmente contra él se separará del proceso, señalan ahora desde el tribunal.
Los jueces señalan que no es posible predecir cuándo se aclarará esta cuestión de la herencia y explica que desconoce si el Vaticano ya ha identificado a los herederos y si éstos han aceptado o rechazado la herencia. El albacea del testamento, Georg Gänswein, secretario personal de Benedicto XVI, está tratando de identificar a los cinco primos del pontífice que aún quedan vivos que serían los legítimos herederos de Benedicto XVI, según la legislación vigente en el Vaticano.
Por su parte, el pontífice emérito en una defensa publicada el 8 de febrero de 2022 ya aseguró que no sabía que el sacerdote fuera un abusador, ni tampoco que ejercía actividad pastoral en Munich. La archidiócesis de Múnich y Frisinga ha señalado por su parte que quiere pagar los daños causados por los abusos. Se trata del segundo juicio por daños y perjuicios de una víctima de abusos contra la Iglesia católica en Alemania.
