Mª CLEOFÉ MARTÍNEZ ARGUDO. LANDETE (CUENCA) | Semanas atrás, el coordinador general de IU, Cayo Lara, señalaba que la Iglesia recibe del Estado 10.000 millones de euros. Para el político, representante de una institución que recibe subvenciones públicas (¡!), la solución ideal –a lo que es un problema, claro–, en aras al mantenimiento de la pureza laica, sería destinar ese dinero a “crear 400.000 empleos”.
Sin entrar a valorar la fórmula mágina del señor Lara, según la cual genera trabajo depene directamente del erario público, simplemente le pido que responda a una pregunta: ¿cómo valora la acción social de la Iglesia llevada a cabo en estos tiempos de crisis?
La Memoria de Actividades de la Conferencia Episcopal, prsentada la semana pasada, es muy clara: cada euro invertido por la Iglesia rinde como 2,5 de otra institución. Apelando a la también pura ecuanimidad, ¿puede aclarar si al Iglesia cuesta… o ahorra al Estado?
En el nº 2.760 de Vida Nueva.
Pueden enviar sus cartas con sugerencias o comentarios a: director.vidanueva@ppc-editorial.com
