Las relaciones entre obispos y religiosos

JOSÉ RAÚL BONNAFOUX GÓMEZ, sacerdote diocesano, SALTILLO (MÉXICO) | En el nº 2.767 de VN, en la entrevista a João Bráz de Aviz, prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada, este responde sobre la relación entre obispos y religiosos: debe “haber cercanía, quererse mutuamente, conocerse, visitarse y dialogar… Necesitamos de verdad que crezca mucho esta relación”. Creo que este es un tema recurrente en la revista.

Yo creo que no se debe hablar solo de relaciones entre obispos-jerarquía y Vida Religiosa.  Los religiosos “llegan” a una diócesis “desde fuera” (aun en el caso que alguno fuera originario). Y saben que es por un tiempo; después, irán a otra. ¿Qué tan “pertenecidos” o unidos, al menos, se sienten a esa Iglesia particular? La relación no es solo con el obispo. Verlo únicamente a él es pensar en la Iglesia verticalmente, no en la Iglesia-comunión.

Sé que la mayoría de los religiosos acuden institucionalmente y con regularidad al obispo para presentarle sus atenciones. Otros solo cuando están consiguiendo el permiso para entrar en la diócesis. En mi diócesis, hay religiosos que ni piden licencias ministeriales. Pero mal estaría una familia en la que los hijos se relacionaran solamente con sus papás y no entre ellos.

La diócesis no es el obispo (mucho menos cuando él también llegó de fuera y no se siente parte de la misma). ¿Qué relación tienen los religiosos con el clero diocesano? ¿O con las religiosas y con los laicos que no siguen “su” carisma o no los apoyan en alguna forma? Al mexicano Pascual Chávez, rector mayor de los salesianos, citado en el Pliego Conflictos y tensiones entre la Jerarquía y la Vida Religiosa, nº 2.711) yo le pongo su frase al revés: ¿Cuánto “aprecian y toman en cuenta”, ellos, los religiosos, a los sacerdotes diocesanos? ¿Cuánto “los valoran por lo que son y no solo por lo que hacen”? Él se refería al aprecio de los obispos hacia los religiosos. ¿Cómo los van a conocer si muchos religiosos no suelen asistir a las reuniones generales, y a veces ni siquiera a la misa crismal?

Algunos religiosos llegan a hacer “su” obra; y la hacen en una circunscripción eclesiástica porque todo el planeta está dividido en diócesis. A muchos religiosos les interesa una diócesis cuando los hacen obispos; pero a algunos, ni entonces, porque solo la tienen como membrete para presentar “su” misión “universal”.

En el nº  2.751, decía Juan Rubio sobre Juan Pablo II: “Hay quien lo acusa de haber entregado a los nuevos movimientos parcelas de poder que ahora dividen a la Iglesia”. ¿No se podría decir que algunas congregaciones religiosas es lo que buscan desde hace tiempo?

El 13 de mayo del año pasado, decía el Papa a los obispos de Portugal: “Quienes viven un carisma particular, han de sentirse fundamentalmente responsables de la comunión, de la fe común de la Iglesia, y deben someterse a la guía de los pastores. Los pastores no son solo personas que ocupan un cargo, sino que ellos mismos son portadores de carismas…”.

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En el nº 2.776 de Vida Nueva.

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