En respuesta preparan el proyecto Unidad Móvil de Primeros Auxilios Psicosociales de la Diócesis de Soacha-Bosa
A las parroquias, a las comunidades de oración y hasta el lugar donde se encuentre algún pastor o sacerdote llegan constantemente mujeres y hombres que manifiestan haber perdido las ganas de vivir. La expresión de su fatiga se ha vuelto el último gesto de personas que luego de ver como lo han perdido todo por cuenta del conflicto, el desplazamiento o por otras consecuencias y manifestaciones del mismo, terminan por desear no vivir más.
Ese es el cuadro general que se advierte con preocupación y por igual, no solo en lugares dedicados a la fe, también se advierte desde puestos de salud, hospitales y organizaciones no gubernamentales a través de sus equipos profesionales, que atienden algún aspecto del necesitado. El diagnóstico es muy preciso y conocido por las propias autoridades de salud del municipio. De 2732 casos valorados a finales de 2011, más del 60 porciento eran mujeres (1860 casos). Con respecto a la población masculina el reporte oficial dio cuenta de 620 casos, de los otros 252 no se consignó el dato. Ese clima mental que parece aumentar o ser el factor común de toda una población, que llega a uno de estos lugares buscando ser escuchada, provocó la idea de una respuesta conjunta entre las autoridades mencionadas y es la Unidad Móvil de Primeros Auxilios Psicosociales de la Diócesis de Soacha-Bosa, un proyecto que apenas se plantea y que es la esperanza de los equipos humanos e interdisciplinarios, que han entendido la magnitud de la situación en este punto del país.
“Es de anotar que a noviembre del año pasado, en Soacha no había servicio de psiquiatría y la atención que se daba era con un profesional que tenía que dar citas para los siguientes seis meses, de cada remisión por dependencias como Medicina Legal, Fiscalía de Soacha, ICBF, Comisarias de familia, Hospital Mario Gaitán Yanguas, entre otros”, reveló el sacerdote Ricardo Martínez, director de Caritas Soacha. Entre las cifras registradas en un solo mes, se registraron 162 intentos de suicidio en personas cuya edad oscilaba en su mayoría entre los 17 y 21 años.
Los dolientes del tema que se han incorporado al proyecto hasta el momento son: los comités parroquiales de Pastoral Social- COPPAS, los Comités Parroquiales de Pastoral de la Salud- CPPS, el Centro de Investigación y Educación Popular/ Programa por la Paz –CINEP, el Servicio Jesuita para Refugiados- SJR, el Secretariado Nacional de Pastoral Social-SNPS, la Fundación Instituto para la Construcción de la Paz –FICONPAZ, la Corporación Universitaria Minuto de Dios -UNIMINUTO, Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca – UCMC, y entidades ONG’S del sector de la Salud Mental del orden nacional e internacional.
La administración municipal así como otras instituciones apenas empiezan a reconocer la importancia y ahora la gravedad del tema. “A pesar de ser vital la Salud Mental como la Salud Física, en un cuadro indicador de 1 a 15, está en quinto o sexto lugar en la atención, y eso siendo muy benévolos en la calificación que establecemos”, comentó el director de Caritas en Soacha, quien agregó que “esta medición es en el nivel gubernamental. Entre las entidades de la academia, las organizaciones no gubernamentales, el tema está en sus preocupaciones, pero priman otros aspectos como la ayuda humanitaria de emergencia, la capacitación y formación, la restitución de derechos, etc”.
Este año, con el inicio de la nueva administración municipal se espera que el tema cobre mayor importancia pues durante 2011 como candidato -hoy alcalde- Juan Carlos Nemocón se informó del problema, planteándose nuevas y posibles respuestas desde su administración como una obligación de Estado. VNC
TEXTO: Jimmy Escobar G.
FOTO: Municipio de Soacha
