Esta mañana, antes de la audiencia general, el papa Francisco ha recibido en audiencia al Celtic Football Club de Glasgow. Durante su encuentro, el Papa ha recordado a los jugadores que, si bien “siempre es preferible ganar un juego que perderlo, ¡esto no es lo más importante! Lo que más importa es el ejemplo que das, tanto ganando como perdiendo, dentro y fuera del campo”.
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“Un ejemplo”, ha continuado Francisco, “que encarna virtudes como la valentía, la perseverancia, la generosidad y el respeto por la dignidad de los demás, que es un regalo de Dios”.
Ejemplo para los jóvenes
Asimismo, el Papa ha señalado que “el apreciado legado de valores de vuestra sociedad impone, pues, sobre vuestras espaldas una gran responsabilidad, recordándoos que sed buenos modelos, especialmente para los jóvenes”. Por eso, “los altos niveles que estáis llamados a alcanzar no se refieren sólo a vuestras habilidades deportivas o a las exigencias clásicas necesarias para sobresalir, sino también a vuestra integridad personal”.
En este sentido, “los hombres y mujeres debéis veros no sólo como buenos futbolistas, sino también como personas capaces de delicadeza, hombres de gran corazón, capaces de ser sabios administradores de los múltiples beneficios de que disfrutáis gracias a vuestra afortunada posición social”. “Con estas breves observaciones”, ha concluido Francisco, “os pido que sigáis recordando y dando testimonio de todo lo que hace del fútbol un deporte verdaderamente bueno y noble”.
