Enrique Lluc
Doctor en Ciencias Económicas

Sostenibilidad de las pensiones


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Mucho se ha hablado y se seguirá hablando de la sostenibilidad del sistema de pensiones. El motivo se ve claro en la siguiente gráfica en la que se ve lo que tradicionalmente se ha denominado pirámide de población y que yo llamo ahora (vista la realidad existente) cántaro de población.

Como se puede observar en la imagen, las personas que están entre 25 y 65 años son las cohortes más numerosas en este país en estos momentos. Su número es superior a quienes vienen detrás y también a las personas de más edad. Eso significa que podemos mantener las pensiones de los mayores gracias a que tenemos a una cantidad de personas en edad de trabajar superior a la de pensionistas.



Cuando los pensionistas actuales vayan falleciendo y las personas en edad de trabajar vayan pasando a ser pensionistas, la situación va a cambiar, porque debido al incremento de la esperanza de vida en la población, la gran mayoría de los que están ahora en la parte ancha del ánfora, llegarán a la jubilación. Esto significa que la diferencia entre las personas en edad de recibir y en edad de trabajar se reducirá.

Esto es un grave problema para un sistema de pensiones en el que los que estamos trabajando financiamos las pensiones de hoy, pero tiene un problema añadido que frecuentemente se olvida: el tema de los cuidados. Porque las personas mayores no solamente reciben sus pensiones sino que también necesitan ser cuidadas. Ante la situación que vislumbramos ¿Qué sucederá cuando las personas disponibles para cuidar sean un número muy parecido a las que tienen que ser cuidadas?

hombre, con gorra, manos levantadas

O comenzamos a articular soluciones para esta situación que se va a dar en un futuro no muy lejano, o nos veremos en una situación social explosiva en la que tendremos problemas para cuidar a nuestros mayores, o más bien, para que cuando nosotros seamos mayores alguien pueda cuidarnos.

La opción del cuidado familiar parece que será difícil con unas familias cada vez más reducidas y más desarticuladas. Tal vez deberíamos plantearnos cómo lograr que haya más personas en edad de trabajar para que este cántaro siga siendo, al menos, más ancho en la parte central.

Para ello, el camino de las ayudas a la natalidad sería un sistema de solucionar esto a medio y largo plazo y a corto, tendríamos que rellenar la parte central con la llegada de trabajadores que pudiesen cuidar a los mayores y pagar cotizaciones que permitiesen el pago de las pensiones.