El Papa advierte en la audiencia general que “el dualismo entre contemplación y acción no pertenece al mensaje cristiano”

La oración “purifica el corazón”, lo que provoca que se “aclare también la mirada” y se pueda ver la realidad “desde otro punto de vista”, dice Francisco durante su catequesis

El papa Francisco, en la audiencia general en la biblioteca del Palacio Apostólico

En la audiencia general que presidió este miércoles en la biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano, el papa Francisco desmintió la supuesta contraposición “entre contemplación y acción” que para algunos existiría en el Evangelio y en la vida de Jesucristo. “Se trata de un dualismo que no pertenece al mensaje cristiano. Hay una única gran llamada en el Evangelio, y es la de seguir a Jesús por el camino del amor. Este es el ápice y el centro de todo. En este sentido, caridad y contemplación son sinónimos, dicen lo mismo”, dijo.



La catequesis del Pontífice estuvo en esta ocasión dedicada a la oración contemplativa, que abre una “dimensión” en el ser humano que resulta “como la ‘sal’ de la vida: da sabor, da gusto a nuestros días”. Se puede lograr mirando el sol cuando sale por la mañana, cuando los árboles “se visten de verde” en primavera , por medio de la música, de un libro o también “delante de una obra de arte o esa obra maestra que es el rostro humano”. 

Francisco recordó que el cardenal jesuita Carlo María Martini, arzobispo emérito de Milán fallecido en 2012, tituló precisamente su primera carta pastoral en la capital lombarda ‘La dimensión contemplativa de la vida’. “Quien vive en una gran ciudad, donde todo es artificial y funcional, corre el riesgo de perder la capacidad de contemplar. Contemplar no es en primer lugar una forma de hacer, sino una forma de ser. Ser contemplativos no depende de los ojos, sino del corazón”, dijo Jorge Mario Bergoglio, insistiendo más adelante en que la oración “purifica el corazón”, lo que provoca que se “aclare también la mirada” y se pueda ver la realidad “desde otro punto de vista”.  

Maratón de oración

Tras citar al santo cura de Ars y a san Juan de la Cruz, el Papa concluyó su catequesis destacando que “lo que nace de la oración y no de la presunción de nuestro yo, lo que es purificado por la humildad, incluso si es un acto de amor apartado y silencioso, es el milagro más grande que un cristiano pueda realizar”.

En su saludo en los distintos idiomas al final de la audiencia general, animó a los fieles a participar en la maratón de oración a la Virgen promovido en los santuarios marianos por el dicasterio para la Nueva Evangelización para pedir el fin de la pandemia.

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