“Nuevas restricciones dentro de los decretos. Mejor hijos de Conte que hijos de curas”. Este verso de la canción Roses, el nuevo éxito del rapero italiano Fedez y Dargen D’Amico, pudo ser la gota que colmó el vaso de Alberto Ravagnani, un joven sacerdote de Busto de Arsizio que, como Fedez –casado con la emprendedora digital Chiara Ferragni–, también es bastante ‘influencer’.
- LEE Y DESCARGA: ‘Un plan para resucitar’, la meditación del papa Francisco para Vida Nueva (PDF)
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
“En Italia la crítica es lunática y fanática, ¡qué agobio! Hace falta al menos un mes para amar, pero para matar solo hace falta un click”, dice otro verso de la canción. Y, precisamente en favor del no matar con un click, tanto Ravagnani como Fedez han dado a todos sus seguidores ejemplo de cómo se puede dialogar y generar cultura del encuentro entre dos posiciones, aparentemente, antagónicas.
Así, el sacerdote, a través de una serie de stories en Instagram, abrió un debate acerca del serio problema que ha supuesto la pedofilia dentro de la Iglesia, pero, también, sobre la labor que se hace en favor de los más desfavorecidos y como esto queda silenciado en muchas ocasiones por los escándalos.
Lograr un bien mayor
“Hola Fedez, soy un sacerdote y soy tu admirador”, dice el sacerdote en sus vídeos. “Mientras escuchaba tu última canción ‘Roses’, me encontré con un verso en tono provocativo. Obviamente, no podemos ocultar que ha habido escándalos en la Iglesia, pero, como siempre un árbol que cae hace más ruido que el bosque que crece”. Por este motivo, Ravagnani dice que, junto a Fedez, si quiere, le gustaría “dar valor a ese bosque que crece”.
“Hay muchos sacerdotes que hacen un trabajo excelente y con un compromiso increíble y nunca se habla de ellos”, continúa. “Eres un influencer y eres muy escuchado: quizás juntos podríamos lograr un bien mayor. Con mucho gusto lo invito a los chicos a los que acompaño le cuenten lo que viven y lo que han conocido en la experiencia con diferentes sacerdotes que han tenido aquí”, añade Ravagnani, dándole las gracias a Fedez por su música.
El problema está en los encubrimientos
Por su parte, el vocalista respondió a las stories del sacerdote asegurando que es consciente de que, como él, “hacen un trabajo excelente” para la comunidad. “Encuentro maravilloso crear un sano debate por medio de las stories, esperemos que se ponga de moda”, bromeaba Fedez.
“Yo mismo tuve una educación católica. Ustedes son trabajadores fantásticos, pero detrás de ustedes hay un estado que los representa, que tiene un enorme poder y que choca con la narrativa espiritual”, explicaba Fedez, centrándose en el caso de la pederastia, ante la que considera que el Vaticano, durante mucho tiempo, se ha limitado a “trasladar a los sacerdotes”.
“No quiero que interpretes mis palabras como un ataque hacia ti, que creo que tienes una gran vocación, sino hacia aquellos que cometen actos que no van en consonancia con la espiritualidad cristiana“, subraya el vocalista. “Tenemos que reconocer que, en ocasiones, el Vaticano ha estado más cerca de realidades turbias que del buen Jesucristo”.
