La Iglesia media en conflictos sociales

En la disputa por un municipio, lo mismo que en los atentados contra defensores de los derechos humanos, actúa una Iglesia mediadora.

Hugo Torres, obispo de Apartadó

El obispo Hugo Torres, obispo de Apartadó, en el Urabá colombiano, ha ofrecido su mediación para defender los derechos de los pueblos indígenas, afrodescendientes y mestizos, implicados en las reclamaciones de los gobernadores departamentales de Chocó y Antioquia sobre el municipio fronterizo de Belén de Bajirá.

Los dos departamentos reclaman como suyo el municipio, rico en oro y palma. El obispo de Apartadó vela, especialmente, por la autonomía de los grupos más débiles políticamente y ofrece mediar entre los gobernadores de los dos departamentos.

Mientras tanto en Montería, el director del Secretariado Nacional de Pastoral Social, monseñor Héctor Fabio Henao, ha promovido un intercambio de experiencias de protección de líderes de derechos humanos. Este año han sido asesinados 20 líderes y entre el primero de enero de 2016 y marzo de este año ocurrieron 156 homicidios que parecen obedecer a una alarmante campaña de exterminio de personas a las que los grupos de derecha miran como agentes de la izquierda.

El 24% de esas muertes se atribuyen a paramilitares o a sus herederos y el 51% de las víctimas fueron líderes de asociaciones veredales campesinas.

Ante este hecho la organización del episcopado convocó a la reunión de Montería a representantes de la Unidad Nacional  de Protección, de la Defensoría del Pueblo, de la Gobernación de Córdoba y de la Policía, en busca de un diálogo que examine a fondo la situación, y que culmine en la adopción de medidas para proteger a los líderes sociales y a desarmar los espíritus.

Compartir