La Iglesia venezolana de luto por muerte de Aldo Giordano

El diplomático falleció por complicaciones de Covid-19, que contrajo a principios de octubre en Bruselas

“La Conferencia Episcopal Venezolana comparte el más profundo sentimiento de comunión y esperanza por el sensible fallecimiento de Mons. Aldo Giordano, quien fue Nuncio Apostólico en Venezuela desde octubre de 2013 hasta mayo de 2021. Paz a su alma”.



Con este trino los obispos venezolanos han expresado su pesar por el diplomático venezolano, sobre todo en cuanto a su cercanía por todo el proceso de beatificación de José Gregorio Hernández.

El diplomático falleció por complicaciones de covid-19, que contrajo a principios de octubre en Bruselas, cuando empezó a ejercer como nuncio ante la Unión Europea.

Ver en el otro a Jesús

Giordano, ordenado obispo y nombrado nuncio de Venezuela, entre 2013 al 2021, recibió su ordenación en manos de su predecesor, el cardenal Pietro Parolin, el 14 de diciembre de 2021.

Estuvo en un periodo político muy crispado y de mayor represión del régimen de Nicolás Maduro, al respecto, el laico venezolano Rixio Portillo, articulista de Vida Nueva y profesor de la Universidad de Monterrey, afirma que “si hubo algún error en su servicio diplomático, en Venezuela, fue de buena fe”.

Según el docente en un encuentro que tuvo con el diplomático en 2015 “nos comentó que siempre intentaba ver en el otro (fuese quien fuese) a Jesucristo, y los que conocemos de cerca su espiritualidad, sabemos que el Jesús del que nos habla Mons. Aldo, es el siervo suficiente y abandonado”.

“En mi libro El Vaticano en la encrucijada venezolana, habla de que solo en el cielo podremos saber cuántas muertes se evitaron con el diálogo, seguro estoy que Mons. Aldo está viendo lo sembrado y los frutos que saldrán de su desvelo por nuestra herida, su querida (como le gustaba decir) Patria venezolana”, añadió Portillo.

Datos biográficos

Giordano era natural de Cuneo, Italia, nació el 20 de agosto de 1954. Ordenado 28 de julio de 1979. Realizó estudios de filosofía en la Pontificia Universidad Gregoriana, en Roma, desde 1978 hasta 1982.

Además fue docente de esta materia en la Escuela inFossano Interdiocesano en Cuneo de 1982 hasta 1996, donde impartió cursos de ética en la escuela de teología para laicos y dictó clases en el seminario diocesano.

En 1995 fue elegido secretario general del Consejo de las Conferencias Episcopales de Europa, cargo que llevó durante 13 años. En 2002, fue nombrado Capellán de Su Santidad y en 2006, Prelado de Honor de Su Santidad.

Foto: Noticiero

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