La Conferencia Episcopal Española pide a Nicaragua que “investigue el atentado” contra la catedral de Managua

El incendio en la catedral de Managua, en el cual quedó calcinada la imagen de la Sangre de Cristo, no solo ha conmovido a la comunidad católica nicaragüense. El dolor ante el ataque ha llegado también a nuestro país, y la Conferencia Episcopal Española, a través de una carta firmada por su presidente, el cardenal Juan José Omella, y el secretario general, Luis Argüello, ha presentado su “fraternidad y cercanía” ante los hechos.



La misiva, enviada al cardenal Brenes en nombre de la CEE y de toda la Iglesia católica en España, pone de manifiesto esta unidad con “nuestros hermanos de Nicaragua, en estos momentos difíciles a causa de los diversos atentados de los que han sido objeto tanto la catedral de Managua como otros templos católicos”, sobre todo atendiendo a que el país se encuentra “en una situación de grave crisis democrática”.

Asimismo, han resaltado que “nos unimos profundamente al dolor del pueblo católico por la agresión vandálica y sacrílega a la santa Iglesia Catedral en la capilla dedicada al Santísimo y a la imagen de Cristo, símbolo de la fe del pueblo nicaragüense”.

Un “cruel atentado”

Por último, la CEE se une en la carta al “clamor de muchos católicos y de hombres y mujeres de buena voluntad para que las autoridades competentes investiguen el origen de estos inaceptables actos violentos, clara expresión de intolerancia y de odio a la fe”. Asimismo, la carta termina haciendo “votos por la convivencia entre todos los nicaragüenses, para lo cual es imprescindible el respeto a la verdad, la justicia y los derechos humanos”.

Por su parte, el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) levantaba el pasado domingo su voz para rechazar y lamentar “el acto demencial” ocurrido en la capilla de ‘La Sangre de Cristo’, calcinando la imagen de 383 años de antigüedad.

De hecho, el episcopado señalaba que la agresión contra esta capilla y la imagen, “símbolo de Nicaragua y refugio de los peregrinos que la han visitado, lesiona profundamente al pueblo nicaragüense por el cruel atentado contra este patrimonio religioso e histórico nacional”.

Noticias relacionadas
Compartir