Prohibidas las armas en las parroquias y los colegios diocesanos de Chicago

Blase J. Cupich, cardenal arzobispo de Chicago

El cardenal arzobispo de Chicago, Blase Cupich, ha publicado un decreto por el cual se prohíbe acceder con armas todas las parroquias, escuelas y demás propiedades de la Archidiócesis de Chicago. En caso de que se detecte su presencia, se solicitará a la persona que abandone las instalaciones.

Así lo recoge Chicago Tribune sobre esta medida que entra en vigor hoy y que responde a las múltiples condenas que el cardenal ha venido haciendo en los dos últimos años sobre la legalización de las armas en Estados Unidos.

Aunque la medida también concierne a sacerdotes, religiosos y personal laboral de la archidiócesis, el documento no prohíbe que los sacerdotes tengan armas para la caza o para deportes que lo requieran, siempre y cuando no estén cargadas y se almacenen con candados o en caja fuerte.

“La intención de esta medida es equilibrar los derechos de todos los que se acercan a las iglesias, escuelas u otras instalaciones con la mayor protección posible para los niños, los ancianos y las personas vulnerables en nuestra sociedad”, escribe Cupich en una carta enviada el pasado lunes a los párrocos.

Long, el obispo australiano que redirige el debate sobre las bodas gays

Australia anda agitada porque el Gobierno ha lanzado una votación por correo para que los 15 millones de electores se pronuncien sobre una futurible aprobación del matrimonio homosexual. Este sondeo llega después de que el Ejecutivo viera fracasado su intento de organizar un plebiscito.

En pleno debate sobre la cuestión, se ha manifestado a través de una carta pastoral el obispo de Parramatta, Vicent Long Van Nguyen, que ha llamado a los católicos a evitar “la polarización” proponiendo un diálogo con “profundo sentido de respeto por todos los interesados y por la opinión y decisión que cada persona es libre de hacer”.

En este sentido, Long recuerda que la encuesta lanzada por el Gobierno aborda si se quiere o no “que la definición legal de matrimonio civil cambie para incluir parejas del mismo sexo”. “No es un referéndum sobre el matrimonio sacramental tal como lo entiende la Iglesia Católica”, apunta el obispo que recuerda la legalización del divorcio en el país: “Ese cambio no alteró las leyes de la Iglesia”.

Por eso, deduce que “cualquiera que sea el resultado de la encuesta, la Iglesia continuará sosteniendo que el matrimonio es una institución natural establecida por Dios como la unión permanente entre un hombre y una mujer”.

Tras este argumentario, el obispo apunta que el matrimonio gay “no es una cuestión simplemente teórica, sino profundamente personal”, por lo que el debate sobre la votación “no debe tratarse como una simple respuesta: sí o no”.

Y es donde radica un nuevo estilo a la hora de abordar la cuestión. Aunque señala que “debe ser una oportunidad para que demos testimonio de nuestro profundo compromiso con el ideal del matrimonio cristiano”, también subraya que hay que “escuchar lo que el Espíritu está diciendo a través de los signos de los tiempos”.

Aterrizando el asunto, reconoce cómo en muchos casos se siente divididos “entre su amor por la Iglesia y su amor por su hijo, nieto, hermano, primo, amigo o vecino del mismo sexo”. Así, lamenta que “lamentablemente, la Iglesia no siempre ha sido un lugar donde se han sentido bienvenidos, aceptados y amados”

Desde ahí reitera que en su Iglesia local,  “como comunidad de discípulos, buscamos acomodarnos, acompañarnos y cuidarnos unos a otros independientemente de la orientación sexual o el estado civil”.

Así, concluye su carta recordando que “se pide a los católicos, de acuerdo con la tradición de la Iglesia, que ejerzan su conciencia, asegurándose de que sean informados a medida que vayan a ejercer sus derechos democráticos en la próxima encuesta postal”.

García Beltrán: “En la técnica y en la ciencia tenemos que poner conciencia”

“En la Iglesia tenemos que aprender a no ser reactivos en materia de comunicación. Tenemos que ser proactivos”. Estas fueron las palabras del obispo de Guadix-Baza, Ginés García Beltrán, clausuró el XXIV Curso de Formación en Doctrina Social de la Iglesia. Retransmitido por el canal de Youtube de la Conferencia Episcopal Española, el también presidente de la Comisión de Medios de Comunicación, subrayó cómo el Papa Francisco “nos habla de transmitir buenas noticias y, en el caso de las malas noticias, hay que transmitirlas con esperanza”.

La intervención de García Beltrán sirvió para cerrar tres intensas jornadas en las que se ha abordado el papel de la técnica al servicio desarrollo humano con el 50º aniversario de la Populorum Progressio de fondo,  y que ha contado, entre otros, con la presencia de Flaminia Giovanelli, del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral.

“Las aportaciones de los expertos estos días nos han hecho caer en la cuenta de que estamos ante un tema apasionante por su actualidad y por su perspectivas de futuro”, señaló el prelado sobre la rapidez de los cambios tecnológicos: “No es buena la sacralización de la técnica, hay que buscar una humanización de la misma. En la ciencia y en la técnica hemos de poner conciencia”.

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