NUNCA ES DEMASIADO TARDE
Desde el 13 de marzo en DVD.
El protagonista de esta historia (el secundario Eddie Marsan con un papel a la medida de su talento) trabaja en un ayuntamiento británico localizando a parientes, amigos o conocidos de gente que ha muerto sola. La cámara estática, su pausado tempo narrativo o un desenlace negro oscuro podrían hacernos pensar en una película sombría y fúnebre, a modo de bodegón mortuorio. Sin embargo, conforme Uberto Pasolini nos muestra las pesquisas de este singular personaje, cada despedida a “sus” difuntos, entendemos que solo ha querido entonar un canto a la vida.“Nuestra forma de tratar a los muertos –parece recordarnos– es un reflejo de cómo nuestra sociedad trata a los vivos”.
EXODUS: DIOSES Y REYES
Desde el 27 de marzo en DVD.
Aspiraba a ser una epopeya bíblica, pero a Ridley Scott le ha interesado más la historia del Moisés caudillo y guerrero (un Christian Bale correcto) que la del pastor y profeta de Israel. El veterano realizador británico pone el acento en la venganza desatada del Todopoderoso contra el opresor egipcio, y no tanto en la peripecia israelita por el desierto, lo cual explica su apuesta por el espectáculo en detrimento de la verosimilitud. Y ahí encuentra esta cinta su total y único sentido. Su brillante factura, a ratos con una estética próxima al videojuego, y su derroche visual –3D incluido–, propios de tantas superproducciones made in Hollywood, se revelan claramente insuficientes para que Exodus: Dioses y reyes acabe atrapando al espectador.
En el nº 2.935 de Vida Nueva