Las 20 frases principales del papa Francisco en Sri Lanka y Filipinas

papa Francisco en un hogar para niños de la calle en Manila, Filipinas, 16 enero 2015

El Pontífice deja en Asia un mensaje de tolerancia y cooperación

papa Francisco en un hogar para niños de la calle en Manila, Filipinas, 16 enero 2015

Francisco, en un hogar para niños de la calle en Manila

M. PÉREZ y M. GÓMEZ | En los seis días que ha durado el viaje del papa Francisco a Sri Lanka y Filipinas, el Pontífice ha pronunciado una docena discursos, homilías e intervenciones, dirigidos a los fieles de ambas naciones asiáticas pero que dejan un poso para todos los creyentes. Son mensajes, principalmente, sobre la convivencia, el diálogo, la libertad religiosa y la construcción de la sociedad desde el don de la fe, y también llamamientos a las familias, a los jóvenes, a los sacerdotes y seminaristas, etc., con vocación de avivar la esperanza en todos los corazones, sobre todo en aquellos que son tentados por el desaliento.

Sri Lanka (13-15 de enero)

Ceremonia de bienvenida (Aeropuerto Internacional Bandaranaike, martes 13)

1. La gran obra de reconstrucción en Sri Lanka debe abarcar no solo la mejora de las infraestructuras y la satisfacción de las necesidades materiales, sino también, y más importante aún, la promoción de la dignidad humana, el respeto de los derechos humanos y la plena inclusión de cada miembro de la sociedad.

Encuentro interreligioso y ecuménico con las cuatro comunidades más grandes de Sri Lanka: budismo, hinduismo, islam y cristianismo (Colombo, Bandaranaike Memorial International Conference Hall, martes 13)

2. Como demuestra la experiencia, para que el encuentro sea eficaz debe basarse en una presentación completa y franca de nuestras respectivas convicciones. Ciertamente, ese diálogo pondrá de relieve la variedad de nuestras creencias, tradiciones y prácticas. Pero si somos honestos en la presentación de nuestras convicciones, seremos capaces de ver con más claridad lo que tenemos en común. Se abrirán nuevos caminos para el mutuo aprecio, la cooperación y la amistad.

3. Por el bien de la paz nunca se debe permitir que las creencias religiosas sean utilizadas para justificar la violencia y la guerra. Tenemos que exigir a nuestras comunidades, con claridad y sin equívocos, que vivan plenamente los principios de la paz y la convivencia que se encuentran en cada religión, y denunciar los actos de violencia que se cometan.

Misa y canonización del beato san José Vaz (Colombo, Galle Face Green, miércoles 14)

4. En san José Vaz vemos un signo espléndido de la bondad y el amor de Dios para con el pueblo de Sri Lanka. (…) Como nosotros, vivió en un período de transformación rápida y profunda; los católicos eran una minoría dividida entre sí, sufrían hostilidad ocasional e incluso persecución. Sin embargo, y debido a que estaba constantemente unido al Señor crucificado en la oración, san José Vaz llegó a ser un icono viviente del amor misericordioso y reconciliador de Dios.

5. La Iglesia en Sri Lanka sirve con agrado y generosidad a todos los miembros de la sociedad. No hace distinción de raza, credo, tribu, condición social o religión en el servicio que ofrece a través de sus escuelas, hospitales, clínicas, y muchas otras obras de caridad. Lo único que pide a cambio es libertad para llevar a cabo su misión. La libertad religiosa es un derecho humano fundamental.

Encuentro con los periodistas durante el vuelo hacia Manila (jueves 15)

6. En el templo budista de Madhu, vi una cosa que nunca me hubiera imaginado: no todos eran católicos, ni siquiera la mayoría. Había budistas, musulmanes, hinduistas, y todos iban allí a rezar: van y dicen que reciben gracias. (…) Ahí está el sentido del pueblo, hay algo que los une. ¿Por qué no puedo ir yo a un templo budista a saludar?

7. No se puede ofender, declarar la guerra, ni matar en nombre de la religión. Es decir, en nombre de Dios.

8. Es verdad que no se puede reaccionar violentamente, pero si el Dr. Gasbarri [organizador de los viajes papales, que se encontraba en ese momento al lado de Francisco] gran amigo, ofende a mi madre, se lleva un puñetazo. Es normal. No se puede provocar, no se puede insultar la fe de los demás. Toda religión que respete la vida humana tiene dignidad, y no puedo ridiculizarla. Ese es el límite. [Papa Francisco: “No se puede insultar a la fe de los demás”]

Filipinas (16-19 de enero)

Encuentro con las autoridades y el Cuerpo Diplomático (Manila, Palacio de Malacañán, viernes 16)

9. En la actualidad, Filipinas, junto con muchos países de Asia, se enfrentan al reto de construir sobre bases sólidas una sociedad moderna, una sociedad respetuosa de los valores humanos, que tutele nuestra dignidad y los derechos humanos dados por Dios, y lista para enfrentar las nuevas y complejas cuestiones políticas y éticas. Es necesario ahora más que nunca que los líderes políticos se distingan por su honestidad, integridad y compromiso con el bien común.

10. Filipinas tiene un papel importante en el fomento de la cooperación entre los países de Asia, así como la contribución eficaz, de los filipinos de la diáspora a la vida y el bienestar de las sociedades en las que viven. A la luz de la rica herencia cultural y religiosa filipina, les dejo un desafío: que los valores espirituales más profundos de este pueblo sigan manifestándose en sus esfuerzos por proporcionar a sus conciudadanos un desarrollo humano integral.

Misa con los obispos, sacerdotes, religiosas y religiosos (Catedral de Manila, viernes 16)

11. Solo si somos pobres nosotros mismos, y eliminamos nuestra complacencia, seremos capaces de identificarnos con los últimos de nuestros hermanos y hermanas. Veremos las cosas desde una perspectiva nueva, y así responderemos con honestidad e integridad al desafío de anunciar la radicalidad del Evangelio en una sociedad acostumbrada a la exclusión social, a la polarización y a la desigualdad escandalosa.

Encuentro con las familias (Asia Arena de Manila, viernes 16)

12. No es posible una familia sin soñar. Cuando en una familia se pierde la capacidad de soñar los chicos no crecen, el amor no crece, la vida se debilita y se apaga. Por eso les recomiendo que a la noche, cuando hacen el examen de conciencia, se hagan también, también, esta pregunta: ¿Hoy soñé con el futuro de mis hijos? ¿Hoy soñé con el amor de mi esposo, de mi esposa? ¿Hoy soñé con mis padres, mis abuelos que llevaron la historia hasta mí. ¡Es tan importante soñar!

13. Para oír y aceptar la llamada de Dios, y preparar una casa para Jesús, debéis ser capaces de descansar en el Señor. Debéis dedicar tiempo cada día a descansar en el Señor, a la oración. Rezar es descansar en el Señor. (…) Cuando la familia reza unida, permanece unida.

Homilía en el Aeropuerto Internacional de Tacloban (sábado 17)

14. Si hoy todos nosotros nos reunimos aquí, 14 meses después que pasó el tifón Yolanda, es porque tenemos la seguridad de que no nos vamos a frustrar en la fe, porque Jesús pasó primero. En su pasión, Él asumió todos nuestros dolores (…). Estoy para decirles que Jesús es el Señor, que Jesús no defrauda.

15. Tantos de ustedes han perdido todo. Yo no sé qué decirles. ¡Él sí sabe qué decirles! (…). No estamos solos, tenemos una Madre, tenemos a Jesús, nuestro hermano mayor. No estamos solos. Y también tenemos muchos hermanos que, en el momento de catástrofe, vinieron a ayudarnos. Y también nosotros nos sentimos más hermanos… que nos hemos ayudado unos a otros.

Encuentro con sacerdotes, religiosas, religiosos, seminaristas y familias de los supervivientes del tifón Haiyán (Catedral de Palo, sábado 17)

16. Hoy, desde este lugar que ha conocido un sufrimiento y una necesidad humana tan profundos, pido que se haga mucho más por los pobres. Por encima de todo, pido que en todo el país se trate a los pobres de manera justa, que se respete su dignidad, que las medidas políticas y económicas sean equitativas e inclusivas, que se desarrollen oportunidades de trabajo y educación, y que se eliminen los obstáculos para la prestación de servicios sociales. El trato que demos a los pobres será el criterio con el que seremos juzgados.

Encuentro con los jóvenes (Universidad de Santo Tomás, Manila, domingo 18)

17. Ciertas realidades de la vida se ven solamente con los ojos limpios por las lágrimas. Los invito a que cada uno se pregunte: ¿yo aprendí a llorar? ¿Yo aprendí a llorar cuando veo un niño con hambre, un niño drogado en la calle, un niño que no tiene casa, un niño abandonado, un niño abusado, un niño usado por una sociedad como esclavo? ¿O mi llanto es el llanto caprichoso de aquel que llora porque le gustaría tener algo más? (…) Si vos no aprendés a llorar, no sos un buen cristiano.

18. ¿Cuál es la materia más importante que tienen que aprender en la Universidad? ¿Cuál es la materia más importante que hay que aprender en la vida? Aprender a amar.

19. Esto es lo que nos falta: aprender a mendigar de aquellos a quienes damos (…). ALas personas a quienes ayudamos, pobres, enfermos, huérfanos, tienen mucho que darnos. ¿Me hago mendigo y pido también eso? ¿O soy suficiente y solamente voy a dar? Vos que vivís dando siempre y crees que no tenés necesidad de nada, ¿sabés que sos un pobre tipo? ¿Sabés que tenés mucha pobreza y necesitás que te den? ¿Te dejás evangelizar por los pobres, por los enfermos, por aquellos que ayudás?

Misa en el Rizal Park de Manila (domingo 18)

20. En el Evangelio, Jesús acoge a los niños, los abraza y bendice. También nosotros necesitamos proteger, guiar y alentar a nuestros jóvenes, ayudándoles a construir una sociedad digna de su gran patrimonio espiritual y cultural. En concreto, tenemos que ver a cada niño como un regalo que acoger, querer y proteger. Y tenemos que cuidar a nuestros jóvenes, no permitiendo que les roben la esperanza y queden condenados a vivir en la calle

 

ESPECIAL VIAJE A ASIA:

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