Fernando Vidal
Director de la Cátedra Amoris Laetitia

Un mundo en la dirección incorrecta


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La encuesta 2022 de la Fundación Open Society, titulada ‘Líneas de falla: perspectivas sobre un mundo en crisis’, nos revela la opinión planetaria sobre la situación de nuestro mundo. La institución fue fundada por George Soros y Bill Gates participa en su financiación. Las preguntas reflejan sus preocupaciones por la democratización global.



Las cosas van muy mal. El resultado principal es que existe una grave preocupación por la crisis económica y no se está satisfecho con la capacidad de las instituciones internacionales para resolver los agudos problemas y crisis que sufrimos. Excepto en Asia y Europa del Este, más de la mitad del resto piensa que sus países van en la dirección incorrecta. En Estados Unidos lo piensa el 69%, en Europa occidental el 58%, en África subsahariana el 67% y en Oriente Medio y Norte de África lo sostiene el 74%.

Respecto al mundo general, Occidente es quien tiene el diagnóstico más pesimista: el 65% de estadounidenses y 63% de europeos occidentales sostiene que el mundo en su conjunto va perdido en la dirección incorrecta. Más de la mitad de los encuestados cree que los países no están respondiendo adecuadamente a desafíos como el cambio climático, las migraciones, la desigualdad o la pobreza.

La mayor preocupación de los encuestados es el coste de la vida, tanto desde la perspectiva de su país, como de la economía concreta en sus familias y comunidades locales. Los países más pobres de la encuesta manifiestan un alto nivel de angustia por la crisis económica y creen que va a generar hambrunas. En África y Latinoamérica hay más de un 79% de encuestados que cree que esta crisis puede llevar a que su familia sufra hambre.

Grandes desafíos

Los encuestados eran preguntados por cuáles eran los mayores desafíos que confrontaban tanto sus familias como sus países. El primer en ambos niveles es la carestía de los productos vitales y la inflación que la provoca. Desde la perspectiva del país, el segundo puesto de preocupaciones lo ocupan la economía y la corrupción. Desde el punto de vista concreto de las familias, la corrupción preocupa mucho menos, y el desempleo, la salud y la economía comparten la segunda preocupación con porcentajes similares. Desempleo y pobreza son la cuarta y quinta preocupación de la gente como sociedad.

La guerra de Ucrania es fuente de preocupación. El 62% de los encuestados piensa que puede desencadenar una guerra nuclear y el 65% sostiene que Rusia es una amenaza para el mundo. A la vez, hay descontento con la capacidad de las agencias mundiales para desescalar el conflicto. Creen que la ONU no está haciendo un buen papel en esta crisis el 28% de los británicos (el 48% no sabe pronunciarse al respecto), el 40% de los alemanes (el 25% no sabe) o el 48% de los franceses (el 27% no sabe enjuiciarlo).

En Turquía y Serbia el descontento supera a la mitad de la población. Solo los países africanos y Ucrania aprueban la labor de la ONU. Señalan a las insuficiencias de una organización que está hecha para el concierto internacional y fácilmente bloqueable por grandes potencias como Rusia, China o Estados Unidos.

Los resultados muestran que una realidad que emerge progresivamente es la conciencia y consenso ecológico en la opinión pública mundial. La humanidad tiene ya una experiencia compartida –al menos un 86% de los encuestados– de que el cambio climático está impactando materialmente en sus vidas. El 77% de los ciudadanos encuestados piensa que hay que dedicar mayores fondos públicos a la lucha y paliación de los efectos del daño ecológico que hemos provocado.

La encuesta pregunta por el apoyo mundial a diversas soluciones que encaren todo este conjunto de agudos desafíos. La tendencia principal es que hay un fuerte soporte a medidas solidarias. El 72% del mundo solicita la cancelación de la deuda externa de los países empobrecidos, el 76% los corredores legales y seguros para migrantes, el 83% la regulación de los precios de los alimentos. La preocupación por las noticias falsas y la manipulación también tiene su lugar: el 80% apoya que se desarrollen medidas para luchar contra la desinformación.

Una reforma profunda

En conclusión, la población mundial está dispuesta a hacer sacrificios y dar apoyo a medidas eficaces contra los más graves problemas. Las instituciones mundiales necesitan una reforma profunda para poder trabajar eficazmente en las soluciones. El mundo va en la dirección incorrecta, pero la gente está dispuesta a poner lo mejor de sí para corregir el devenir de la humanidad.

La encuesta diseñó una muestra de 21.413 encuestados de 22 países de los cinco continentes —hay 195 países en el mundo— y el trabajo de campo fue realizado por distintas compañías demoscópicas en julio y agosto de 2022. El informe de resultados se puede descargar libremente en https://www.opensocietyfoundations.org/publications/fault-lines-global-perspectives-on-a-world-in-crisis.

 

Open Society Foundations (2022). Fault Lines: Global Perspectives on a World in Crisis. Open Society Foundations, 6 de septiembre de 2022.

Agencia EFE (2022). El clima y Ucrania, entre las principales preocupaciones según una encuesta global. Agencia EFE, 7 de septiembre de 2022.