La Iglesia Católica de los Estados Unidos celebrará del 18 al 24 de septiembre su Semana Nacional de la Migración, la cual culminará con el Día Mundial de los Migrantes y Refugiados, establecido por la Santa Sede hace más de 100 años y conmemorado por los católicos de todo el mundo.
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A lo largo de esta semana, los obispos norteamericanos realizan varios eventos para motivar a los fieles a reflexionar sobre los desafíos que enfrentan los migrantes, refugiados y otros afectados por el complejo fenómeno del desplazamiento forzado.
Pero también, analizan y promueven las formas en que los migrantes enriquecen a las comunidades de acogida y cómo cada católico está llamado a responder a ellos como miembros de la misma familia humana.
“Libre de elegir entre emigrar o quedarse”
Cabe mencionar que, para la celebración de este año, el papa Francisco escogió el tema ‘Libre de elegir entre emigrar o quedarse’, subrayando el derecho natural a no emigrar de la patria.
Los obispos señalaron a través de un comunicado que el derecho a emigrar ha sido durante mucho tiempo una parte integral de la enseñanza social de la Iglesia Católica sobre la migración, haciendo hincapié en la intersección entre este derecho y las causas fundamentales del desplazamiento forzado.
Parafraseando al Santo Padre, los obispos lamentaron que “la decisión de migrar siempre debe ser gratuita, pero en muchos casos, “incluso en nuestros días, no lo es”.
Señalaron que si bien los conflictos, desastres naturales o simplemente la imposibilidad de vivir una vida digna y próspera en la tierra natal está obligando a millones de personas a irse, por lo general los migrantes “huyen debido a la pobreza, el miedo o la desesperación”.
Eliminar estas causas y así poner fin a la migración forzada -apuntaron- requiere un compromiso compartido por parte de todos, “de acuerdo con las responsabilidades de cada uno”.
Caridad para los migrantes
En el marco de esta Semana Nacional de Migración, el obispo de El Paso, Mark J. Seitz, en calidad de presidente del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), aseguró que los católicos, están obligados a responder con caridad hacia aquellos que deben arrancar de raíz sus vidas en busca de refugio.
Además, dejó en claro que solo a través de esfuerzos colectivos para aliviar estas fuerzas y estableciendo las condiciones requeridas para el desarrollo humano integral, pueden las personas realmente hacer uso del derecho a permanecer en su país de nacimiento.
Para conocer más acerca de la Semana Nacional de Migración es necesario visitar el siguiente enlace.
