La Subcomisión de Juventud e Infancia de la Conferencia Episcopal Española y la Universidad Pontificia de Salamanca lanzan una nueva edición del Máster en Pastoral Juvenil para el curso 2021-2022. Una propuesta que se cursa en modalidad semipresencial y que permitirá a los agentes de pastoral, sacerdotes, laicos y religiosos, tener una sólida formación para los retos de este importante campo pastoral. Jesús Rojano, salesiano, director del máster y Raúl Tinajero, director de la Subcomisión de Juventud e Infancia, presentan a Vida Nueva esta nueva edición que regresa tras la buena acogida de la primera, en el curso 2018-2019.
El Podcast de Vida Nueva: Ministras para la historia- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
La urgencia de la formación
PREGUNTA.- Se acaba de presentar la segunda edición de este Máster de Pastoral Juvenil, ¿cómo ha evolucionado esta propuesta de 2018 hasta ahora?
RESPUESTA.- En la primera edición estábamos en pleno proceso del Sínodo sobre los Jóvenes. Fueron más de 20 alumnos los que, envidados por sus diócesis, congregaciones, movimientos, participaron en esta primera edición. Después, a consecuencia de la pandemia, se han paralizado o retrasado muchas actividades. Esta segunda edición se presenta en esta fase esperamos que final de la pandemia y a dos años de la conclusión del Sínodo con la exhortación Christus vivit. Estos dos hechos ya nos dan un contexto distinto y nos indican que hace falta no menos sino mucha más formación para los agentes de pastoral juvenil. Se ha renovado la distribución de asignaturas y su carga horaria para intentar que sea más práctico y experiencial sin perder calidad formativa.
Invertir en evangelización
P.- ¿Qué se juega la iglesia española si no “invierte” en pastoral?
R.- Invertir en pastoral es invertir en evangelización, y “la Iglesia existe para evangelizar” (Pablo VI en Evangelii nuntiandi), con nuevos métodos y ardor (Juan Pablo II), y vive de “la alegría de evangelizar” (Evangelii gaudium, Francisco). Como se dijo en el Documento Final del Sínodo de los Jóvenes, es “en las relaciones —con Cristo, con los demás, en la comunidad— es donde se transmite la fe. También con vistas a la misión, la Iglesia está llamada a asumir un rostro relacional que ponga en el centro la escucha, la acogida, el diálogo, el discernimiento común, en un camino que transforme la vida de quien forma parte de ella” (DF 122) y “de hecho, lo que evangeliza es la calidad de tales relaciones” (DF 128).
Esto en Pastoral Juvenil es más importante si cabe… Este Máster prepara a agentes de pastoral en ese sentido. Nos jugamos mucho en ello, por tanto.
P.- ¿Cuáles han sido los ecos de la primera promoción?
R.- Para la primera promoción del Master ha sido una experiencia enriquecedora, un paso adelante en su formación e implicación en la tarea pastoral, para el servicio en su diócesis, congregación, movimiento. Es cierto que debemos acoger todo lo positivo que nos han ofrecido en sus revisiones los alumnos de la primera edición y hemos abordado, esperemos con acierto, aquellas deficiencias o complicaciones que se han detectado.
Esperamos que vaya teniendo un efecto multiplicador en las diversas diócesis, movimientos y congregaciones. Es una semilla que se va sembrando y, como dice el evangelio, va creciendo de noche, sin mucho ruido, mientas el sembrador duerme… El Sínodo dedicó un capítulo entero del Documento Final a la importancia de una formación profunda e integral para los agentes de pastoral con jóvenes.
Los próximos responsables
P.- ¿Quiénes se han acercado hasta ahora a este máster? ¿cuál es el perfil de los destinatarios?
R.- En la primera promoción había sobre todo sacerdotes jóvenes, religiosos y laicos, todos ellos implicados y con puestos de responsabilidad en la coordinación de la pastoral juvenil. El Master está indicado principalmente para aquellos que son enviados por los obispos en sus diócesis, superiores generales de las congregaciones y presidentes de movimientos, en vistas que vayan asumiendo mayores responsabilidades en la coordinación y animación de la pastoral con jóvenes en sus realidades.
P.- El máster hace un acercamiento integral a la realidad pastoral en la que se mueven los jóvenes a través de los diferentes módulos. ¿Qué aportaciones de otras disciplinas enriquecen a la pastoral juvenil?
R.- Además de la Teología, la pastoral juvenil necesita de lo que solemos llamar “ciencias humanas” o “humanísticas”, sobre todo la Psicología, la Sociología y la Pedagogía. Y van cobrando mucha importancia las ciencias de la comunicación y las nuevas tecnologías, porque sabemos que los jóvenes habitan y viven cada ve más en el llamado continente digital.
