Las instituciones educativas religiosas de la Argentina reclaman por la actividad educativa presencial

Alumnos en clase de Religión, en una foto de archivo curso 2016/2017

La Federación de Asociaciones Educativas Religiosas de la República Argentina (FAERA) demandó cooperación para poder acelerar el regreso parcial a la actividad educativa presencial.


El pedido tuvo como destinatarios a la generación adulta que tiene la responsabilidad de garantizar y promover los derechos a la educación de menores y jóvenes, tanto familias, educadores, instituciones como ministerios y legisladores.

Actividad educativa, esencial

Los miembros de FAERA plantearon la realidad de las entidades educativas. Creen que en estos siete meses de actividad remota – que por distintos motivos no pudo ser sincrónica ni sostenida-, afectó la salud integral de los chicos, sobre todo en esta segunda parte del ciclo escolar. “Es urgente considerar que la actividad educativa es esencial”, expresó la Federación.

Reconocen que el futuro próximo será de convivencia con el virus del covid-19 y la prevención y el cuidado para no arriesgar la vida de otras personas. Pero, hay que considerar la situación de los chicos “que hace ya siete meses que están en situación de aislamiento y sufren distintos tipos de dolencias que influyen en su normal desarrollo físico, psíquico, intelectual y espiritual”.

Desean visualizar la situación de tantos chicos que cursan su escolaridad con programas específicos en la educación común, de aquellos que se encuentran en instituciones de educación especial, y sobre todo los que son más vulnerables por la pobreza. “Sabemos que para ellos especialmente este tiempo, en muchas situaciones particulares, significará un retroceso que esperamos no sea irremediable”, enfatizan.

El esfuerzo de las instituciones

Más allá de las limitaciones que muchas instituciones tienen, Faera asegura que han hecho todo lo posible para mantener el vínculo pedagógico.

Para ellos, la escuela presencial es mucho más que transmisión de conocimientos. Es ámbito de escucha, atención a situaciones particulares, cuidado de la salud física, psíquica y espiritual, prevención de la violencia. Es orientación también para las familias.

Con este panorama, insisten en convocar a los responsables para, desde el lugar que cada uno ocupa, cooperar y arbitrar todos los medios disponibles para iniciar urgentemente la actividad en los ámbitos educativos.

Cabe acotar que el Ministerio de Educación de la Nación recién esta semana habilitaron este tipo de actividad, pero solo para aquellos alumnos que deben cerrar un ciclo de formación, tanto los que terminan el ciclo inicial, como para quienes estén por egresar del colegio secundario.

Noticias relacionadas
Compartir