Religiosas teresianas utilizan cuentos para concientizar sobre medio ambiente y bullying

  • La directora del Centro Santa Teresa de Jesús, en la localidad de Los Cocos, Nicaragua, considera que ante un sistema educativo que no busca mejorar la calidad, este colegio es una alternativa
  • Para las religiosa, algunas escuelas “están más concentradas en gestionar recursos y dar cumplimiento, en vez hacerlo en los buenos aprendizajes para que los niños tengan las capacidades necesarias”

Religiosas del Centro Santa Teresa de Jesús, en la localidad de Los Cocos, en la región de Granada en Nicaragua, concientizan a los niños mediante cuentos. Fue en el año 2017 cuando un grupo de voluntarios españoles creó la historia de “Martina, la gamusina”, y en el 2019, “El gol de Valentina”, que tratan sobre el cuidado del medio ambiente y el bullying, respectivamente.

En entrevista para Vida Nueva, la directora de ese centro educativo, la religiosa Carmen Patricia Castillo, relató que la idea de crear la historia de ‘Martina, la gamusina’, surge en esta escuela primaria rural que atiende a 330 niños, y está ubicada a las orillas del Lago Cocibolca, “en un lugar donde se trabaja entre mucha vulnerabilidad, ya que la gente vive en un ambiente de bastante dificultad económica”.

Por esta razón, el colegio promueve constantemente la participación de las personas en la educación de los niños; “asisten muchos voluntarios de la Compañía de Santa Teresa de Jesús; y anualmente también acuden ex alumnos de colegios teresianos españoles, entre ellos David García, miembro de la organización Educo de España; a ellos se les encargó que promovieran la lectura; es entonces cuando se les ocurrió realizar un cuento propio del poblado donde se encuentra el colegio”.

Detalló que en la historia de ‘Martina, la gamusina’ le dan vida a un pez del río, propio de la región, llamado gamusino. Justo frente a la escuela está ese río. Se propuso que la historia con el animalito tenía que tratar un tema problemático, que en ese tiempo era la basura; necesitábamos que a través del cuento los niños pudieran mantener limpia su escuela y dejar de tirar basura”.

Portada del libro ‘Martina, la gamusina’

Carmen Castillo señaló que fue así como armaron la trama, “el pez de colores viene a la escuela, luego se transforma y se sabe que, si encuentra basura, se va a ir a ríos más limpios. Es un cuento para motivar a los niños a que cuiden el medio ambiente y coman saludable porque los peces gamusinos se alimentan de fruta”.

Historias que causan impacto positivo en los niños

A partir de esta historia –dijo- la escuela es un lugar muy limpio; “los niños piensan, a partir del cuento, que los gamusinos se van a ir si encuentran sucio; de esa manera se ha creado un impacto en los chicos. La primera edición del cuento fue impresa en España en 2017, posteriormente otras ediciones en Nicaragua. Al adquirir el libro se regala una piedrita que es pintada de colores por algunos de los alumnos que asisten a un taller”.

Con relación al otro libro, titulado ‘El gol de Valentina’, éste se imprimió en España en septiembre de 2019 y en noviembre en Nicaragua. En este texto –explicó- “tratamos el tema del bullying; la trama es acerca de una niña que juega futbol y, por ser niña, le hacen bullying, entonces los gamusinos y el club de niños que han sido amigos de los gamusinos la protegen y la cuidan”.

Por otro lado, la religiosa teresiana señaló que desafortunadamente el tema de la violencia en Centroamérica está muy presente en los ambientes familiares y de los barrios; el trato al niño, la agresión, los golpes. “Los niños están bastante desprotegidos en este sentido, así como los abusos en su contra y las dificultades educativas, pues las escuelas en el país están más preocupadas por mantener la planilla de los docentes, que por la calidad y la lectura o el entusiasmo por aprender”.

Denunció que esto ocurre cuando las escuelas están más “concentradas en gestionar recursos y dar cumplimiento, y no en que se den buenos aprendizajes para que los niños tengan las capacidades necesarias”.

Por tal motivo, consideró que el Centro Santa Teresa de Jesús “es una alternativa de protección, desarrollo y promoción de la niñez, ya que es un espacio muy vivo, alegre, creativo, donde aprender es motivante, además el implicar a los padres en la escuela es algo que ayuda, que se involucren en la educación y formación de sus hijos, eso ha coadyuva mucho a la prevención. Aparte, todos los días se les da a los niños su almuerzo y su merienda, para que ellos estén más animados para estudiar”.

La religiosa concluye que “merece la pena vivir haciendo acciones que de verdad transformen cosas que puedan generar un cambio; al comprar nuestros cuentos estarán comprando algo para aportar a la educación de estos niños, es así que la acción tiene un valor mayor”.

Ambos libros pueden ser adquiridos en los institutos teresianos de México, Centroamérica y Latinoamérica, así como en España.

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