Una producción audiovisual nunca antes vista en la Iglesia:
guión y contenidos en manos de profesionales,
equipamiento HD de última generación, sonido digital y hasta un drone.
Por primera vez, una serie televisiva sobre el Derecho Canónico para entender cómo funciona la estructura eclesial.
Con el objetivo central de difundir la Ley de la Iglesia y darla a conocer, nace Cánones de Iglesia, un documental de 15 episodios que nunca antes se había visto entre las producciones católicas. Dirigida por Gustavo Corrado, cineasta argentino de trayectoria en la cine europeo, y conducido por Alejandro López Romano, abogado doctorado en Derecho Canónico, la idea de este proyecto es acercar las reglas que rigen la vida pastoral de los fieles a la gente de Iglesia.
“En este momento estamos en la etapa de la difusión del material. La distribución mundial la adquirió 3C Films Group y los capítulos fueron presentados en el Mercado del Audiovisual de Guadalajara con gran interés de parte de varios canales católicos de México, Estados Unidos y Latinoamérica”, explica Corrado, que además adelanta que ya están pensando la segunda etapa de este proyecto que denominarían Cánones de Iglesia – Latinoamérica.
“Nuestra expectativa como realizadores es poder seguir con nuestra idea de difundir la Ley de la Iglesia y darla a conocer a los fieles. Quereos acercar las tecnologías para la realización y difusión de temáticas católicas insertándolas en este nuevo mundo digital y cibernético tan dinámico y cambiante, donde el espectador está habituado a recibir información por otros canales distintos a los tradicionales, como los teléfonos inteligentes u otros dispositivos”, asegura a Vida Nueva el director de esta serie televisiva.
El rodaje de Cánones de Iglesia se llevó a cabo en Buenos Aires, en La Plata, en Roma y en el Vaticano. Para cada uno de las filmaciones, Corrado y su equipo utilizó equipamiento HD de última generación y sonido digital. Pero lo más novedoso es la incorporación de un drone para los planos aéreos, una tecnología aún no utilizada en producciones católicas.
Un instrumento para ordenar
Es bienvenida una serie de estas características ya que para el común de las personas, hablar de Derecho Canónico es algo misterioso, es algo al que solo acceden los doctos. Sin embargo, se trata de la Ley que rige la vida pastoral de los creyentes. López Romano lo describe así: “Cuando se estudia el Derecho Canónico, uno no puede más que enamorarse de la Ley de la Iglesia que, claro está, no se agota en el Código de Derecho Canónico. Por eso, esta riqueza debemos compartirla”.
“Los canonistas –sostiene– notamos gran curiosidad por parte de la gente, la necesidad de conocer un poco más cómo funciona la Iglesia, su estructura jerárquica, los derechos y deberes de los fieles cristianos, las formas de los sacramentos (en especial, en estos momentos, el matrimonio), el tratamiento de los delitos en la Iglesia (como el abuso sexual, un delito gravísimo que en estos tiempos tienen tanta resonancia), los medios de evangelización y la enseñanza católica, entre tantos otros muchos temas”.
Casi como en una clase magistral, el abogado canonista explica: “No debemos dejar de tener en cuenta que la Iglesia es también una sociedad y, como tal, precisa regular los derechos y deberes de sus miembros: la función de enseñar, de regir y de santificar que Cristo confió a sus apóstoles. El Derecho Canónico es el instrumento para ordenar, para regir”. Y agrega: “El Magisterio, la Escritura y la Tradición son los tres pilares sobre los que se sustenta la Iglesia de Cristo. La ley de la Iglesia requiere de una profunda reflexión teológica, ya que es su verdadera esencia. Su fin es la salvación de las almas de cada fiel cristiano. La ley eclesiástica guía en ese camino y está al servicio del hombre. Derecho humano y derecho divino van en idéntico sendero y su finalidad es la salus animarum: más que afectar al fiel, lo tutela, lo guía, lo acompaña en el camino hacia su salvación”.
Bajo esta concepción es que se construyó la idea de Cánones de Iglesia y las entrevistas de cada uno de los 15 capítulos.
Entender cómo funciona la Iglesia
Cada uno de los capítulos de Cánones de Iglesia tiene una duración aproximada de 30 minutos. La dinámica central de la serie consiste en una entrevista, con rasgos de reportaje, a destacados referentes de la Iglesia católica, donde el protagonista es el entrevistado y la escenografía, su ámbito de trabajo.
Desde el primer momento, Corrado intentó que el lenguaje sea lo más simple posible “para que se pueda trasmitir a los fieles una clara información”, y que el mensaje se transmita de forma clara “para entender cómo funciona la institución eclesial, su dinámica interna, su gobierno, etc.”
El cineasta cuenta cómo se fue gestando esta iniciativa: “En mis años en Italia formé parte de varios proyectos cinematográficos de temática católica. Al volver a la Argentina, busqué asociar mi oficio de cineasta a lo eclesiástico. Luego de pensar en posibles temáticas creí encontrar el proyecto ideal por todo lo que significaba esa vida en el mundo de la Iglesia latinoamericana: una película sobre monseñor Enrique Angelelli”. Y continúa su relato: “Recordé que mi ex compañero del Colegio Don Bosco de Bernal (Buenos Aires), Alejandro López Romano, se había doctorado en Derecho Canónico en Roma. Él es muy cercano al obispo de La Rioja, Marcelo Colombo (también canonista), lugar indicado para filmar esta película. Pero lamentablemente, afrontar los costos de tamaño desafío (sonidistas, camarógrafos, actores, asesores, material, etc.) es muy dificultoso y no había suficientes recursos para tamaño proyecto”.
“De otra charla compartida, surgió la idea de difundir la Ley de la Iglesia, un proyecto que López Romano había desarrollado con otro colega, Francisco E. Piedrabuena. De la unión de las especialidades de cada uno, más una buena cuota de osadía y el apoyo de la Universidad del Cine (FUC) que dirige Manuel Antín, llegamos a construir esta fascinante aventura: Cánones de Iglesia”, recuerda el cineasta.
Sin embargo, esta “osadía” no termina aquí. Más allá de encontrarse proyectando el ciclo sobre la Iglesia latinoamericana, Corrado asegura que tienen un proyecto aún más ambicioso: “Queremos realizar la historia del Papado, rodando en los lugares fundamentales, como Jerusalén o Avignon, donde tuvo lugar esa fascinante historia, y terminando en el Vaticano con nuestro papa Francisco”.
NICOLÁS MIRABET
“ALGO MALO VEO EN USTED”
Relata Gustavo Corrado: “Mientras rodábamos, vivimos un momento muy sugestivo en la audiencia pública del 8 de octubre pasado. Estábamos filmando el momento donde Alejandro López Romano saluda el papa Francisco y le entrega su libro Nociones elementales sobre la Ley de la Iglesia. Al lado de Alejandro había una persona grande, muy cordial y afable. Su Santidad se acerca para saludarla y al tomarle su mano –en presencia nuestra– le dice: ‘algo malo veo en usted. Voy orar por sus intensiones’. Este buen hombre se quebró en llanto… Todo este momento quedó filmado en el trailer de Cánones de Iglesia. Luego, comentamos este hecho con algunos de nuestros entrevistados en Roma. Varios nos contaron que estaban enterados de situaciones similares con fama de santidad. El Espíritu Santo se vale de Francisco como un maravilloso instrumento para realizar su obra”.
