“La guerra continúa en Ucrania, la gente está agotada”

Los obispos ucranianos agradecen la colecta inédita promovida por Francisco para ayudar a las víctimas

ciudad de Donestk en Ucrania, devastada por la guerra

Estragos del conflicto en la localidad ucraniana de Donestk

“La guerra continúa en Ucrania, la gente está agotada” [extracto]

MARÍA PÉREZ | “Además de acompañarlos con mi constante pensamiento y mi oración, he decidido promover una acción de apoyo humanitario a favor de Ucrania. Con tal fin tendrá, lugar una colecta especial en todas las iglesias católicas de Europa el próximo domingo 24 de abril”. Con estas palabras, el papa Francisco anunciaba una iniciativa histórica, en favor de “quienes se encuentran en estas tierras golpeadas por la hostilidad”.

Según los datos de la Santa Sede, actualmente medio millón de personas tiene una necesidad urgente de alimento; faltan medicamentos y el acceso al agua potable corre peligro. Una situación especialmente dramática para los niños, pues cerca de 200.000 menores habrían tenido que abandonar sus casas desde que comenzara hace dos años la guerra.

Un conflicto “silenciosamente dramático”, en palabras de Borys Gudziak, obispo de la eparquía (diócesis) grecocatólica ucraniana de París y presidente de la Universidad Católica de Ucrania, quien, en conversación con Vida Nueva, afirma que la población está “agotada, física y psicológicamente”: “Muchos de ellos han tenido que abandonar sus ciudades y se han convertido en refugiados”, y, para los que continúan allí, la vida no es fácil: “Los salarios se han devaluado y faltan recursos básicos”. La guerra ha acabado con la principal fuente de trabajo: su sector industrial, especialmente fuerte en las provincias orienrales de Lugansk y Donestk, ahora anegadas por la guerra.

Gratitud hacia el Papa

“Mucha gente fuera del país no se da cuenta de que la guerra continúa porque no se le presta atención. Pero la realidad es que cada día hay personas que mueren”, manifiesta el obispo Borys Gudziak. Eso sí, no duda en mostrar su gratitud hacia el Papa: “Todos los ucranianos le damos realmente las gracias, papa Francisco”.

Por su parte, el nuncio apostólico en Ucrania, Claudio Gugerotti, afirma que “solo se habla del conflicto gracias al Papa. El Santo Padre no se detiene en consideraciones de carácter estratégico, sino donde hay sufrimiento, él habla y quiere estar cerca”.

Quién sabe si las colectas en favor de un país se convertirán en una constante a lo largo del Jubileo de la Misericordia. Por el momento, y según ha confirmado el Vaticano, esta irá destinada a todos los ucranianos, sin importar su religión; y será distribuida a través de las comunidades religiosas presentes en el país. La gestión de los fondos recaudados será realizada por el Pontificio Consejo Cor Unum.

Próximo destino: Lesbos

El viernes 15 de abril, Francisco visitará la isla griega de Lesbos junto al patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I; y el arzobispo de Atenas, Ieronimos II, cabeza de la Iglesia Ortodoxa griega. Un viaje de un solo día que tiene una doble finalidad humanitaria y ecuménica: llamar la atención sobre el drama de los refugiados (como ya hiciera en su primer viaje apostólico a Lampedusa) y acercar posturas con el resto de líderes cristianos.

Según ha confiado la Iglesia griega, el deseo de este viaje es incidir “en la conciencia de la comunidad internacional para el cese inmediato de las hostilidades en la región mediterránea y Oriente Medio, que afectan fuertemente a las comunidades cristianas, así como a la emergencia y grave problema humanitario de los refugiados desesperados que buscan un futuro mejor en el continente europeo”.

En el nº 2.983 de Vida Nueva