El XII Congreso de EC propone dar respuesta a los cambios sociales
Escuelas Católicas: renovación desde las raíces [extracto]
FRAN OTERO. Fotos: ESCUELAS CATÓLICAS | Acaba de celebrarse en Valladolid, del 21 al 23 de noviembre, el XII Congreso de Escuelas Católicas (EC) bajo el lema Escuela creativa. Emprender, participar, dar sentido, y en la que se ha puesto de manifiesto, según las conclusiones, que “la crisis puede convertirse en una oportunidad a través de la creatividad, la participación, el carácter emprendedor y el sentido cristiano de nuestras instituciones titulares, centros y equipos directivos”.
Una oportunidad que no se ha desaprovechado y que ha derivado en un modelo organizativo, pastoral y pedagógico “para seguir respondiendo con calidad e innovación a los cambios que venimos afrontando”.
Un modelo que se asienta sobre ocho ideas fundamentales, y que no son sino consecuencia de las numerosas e interesantes intervenciones recogidas en un documento que dio a conocer la presidenta de EC, Inmaculada Tuset:
- 1. La escucha atenta y acogedora es un regalo maravilloso para nuestros niños;
- 2. Se necesitan personas y equipos que multipliquen su talento de forma cooperativa y colaborativa;
- 3. Ninguna escuela es una isla en el mundo de hoy;
- 4. Las redes sociales generan cambios y las familias y educadores somos responsables;
- 5. Tanto desde el esfuerzo como desde la felicidad se aumenta la inteligencia y la creatividad;
- 6. Una escuela del siglo XXI fomenta la comprensión y la creatividad, y enseña el lenguaje del pensamiento y las emociones;
- 7. Hay que sustituir competitividad por cooperación, y afán desmedido de riqueza por solidaridad y fraternidad; y
- 8. Dar sentido es dar orientación, y orientamos hacia Jesucristo y su mensaje.
Un proyecto que, además, parece dar respuesta a la pérdida de algunos valores en la sociedad, como se ha puesto de manifiesto con la crisis económica y social que vivimos.
El secretario general de EC, José María Alvira, lo explica claramente en declaraciones a Vida Nueva tras el Congreso: “La educación, y más cuando se plantea una nueva ley, no debe perseguir solo la formación de buenos profesionales, que está muy bien, sino también la formación de buenas personas”.
Y añade que si la escuela católica puede plantearse proyectos con mayor creatividad e innovación es porque tiene “unas raíces sólidas”.
Así también lo dijo en la clausura, el sábado 23: “Esas raíces son nuestro logro. Los frutos solo son posibles porque sus raíces son sólidas, y por eso acogemos con gusto todas las llamadas y sugerencias a la creatividad, como algo natural de la educación católica”.
Durante los tres días que duró el congreso, al que asistieron más de 1.300 representantes de instituciones titulares y responsables de centros educativos, se recorrieron nuevas formas de hacer escuela en las que suenan con fuerza la creatividad, el emprendimiento, la participación y el sentido.
Intervinieron, entre otros, la presidenta de la Fundación Reggio Children-Loris Malguzzi Centre, Carla Rinaldi; el socio director de BeUp y profesor en ESIC y en la UCM, Juan Carrión; el director de la Escuela Diocesana de Parramata (Australia), Greg Whitby; la profesora de la UOC, Dolors Reig; y el secretario de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, José Rodríguez Carballo, que ante la imposibilidad de asistir envió su intervención en formato audiovisual.
Educación, valor primordial
Más allá de la reflexión intelectual y del debate concreto, este evento también destacó por el gran ambiente y por el intercambio de experiencias y proyectos, además de por ser un estandarte en la defensa de la educación como valor primordial para una sociedad.
Así lo dijo el consejero de Educación de la Junta de Castilla y León, Juan José Mateos, durante la mesa inaugural: “La educación es el mejor valor de nuestra sociedad”.
En ella estuvo presente el nuncio en España, Renzo Fratini, que apuntó que la educación “no puede prescindir de Dios” y que la escuela católica “debe promover la santidad y hacer ver a los jóvenes que la verdadera felicidad se encuentra en Dios, no en el éxito profesional, puesto que solo Él puede satisfacer las necesidades más profundas de nuestro corazón”.
Por su parte, el presidente del Consejo Escolar del Estado, Francisco López Rupérez, señaló que, en un tiempo complejo para la educación, la innovación se hace imprescindible para abrir nuevos caminos e idear nuevas soluciones. “En educación, esta innovación debe ser efectiva, debe demostrar empíricamente un impacto positivo y tangible sobre la mejora, que ha de ser sostenible, como modelo para desarrollar en otros lugares y por otros profesionales”, añadió.
La guinda a estas jornadas la pusieron los representantes de EC, así como el presidente del Consejo Escolar de Castilla y León, Marino Arranz, y el obispo de Zamora, Gregorio Martínez. Un congreso que, en palabras de Alvira, “ha conseguido los objetivos fundamentales propuestos: aprender, convivir y reforzar la red de la escuela católica en España, y afirmar y celebrar su identidad”.
Precisamente, de la identidad habló Gregorio Martínez, que dijo a los allí presentes: “Estáis al servicio de la evangelización y debéis dedicar todos los esfuerzos para entrar en esta dinámica que nos invita la Iglesia. Me gustaría que mantuvierais la comunión con los pastores de la Iglesia y cuidarais la comunidad educativa de vuestros centros y fuerais una familia”.
Redes Sociales
Además de en el auditorio Miguel Delibes de Valladolid, el XII Congreso de Escuelas Católicas estuvo presente en muchos otros lugares gracias a las redes sociales. En Twitter, por ejemplo, este evento consiguió ser trending topic en todas las ponencias: “Con el #participaec13 fuimos TT durante 28 minutos, mientras que el #felicidadec13 llegó a ser visto por 88.412 personas gracias a los 930 tuits emitidos desde 465 cuentas distintas”.
Además, la página web creada para la ocasión registró 11.400 visitas, mientras que 7.500 personas vieron las fotos a través de Flickr y 6.364 las presentaciones de los ponentes a través de Slideshare.
Finalmente, fueron más 10.000 los usuarios de Internet, desde 22 países diferentes, los que siguieron en directo vía streaming algún momento del congreso.
Sobre la LOMCE
Aunque no fue tema de reflexión, sí se habló durante el congreso, sobre todo en los pasillos, de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), que se aprobó definitivamente el 21 de noviembre en el Senado y que para Escuelas Católicas ha supuesto “una vez más, una ocasión perdida para mejorar aspectos importantes de la nueva ley”. “La verdad es que nos sentimos decepcionados”, dice a Vida Nueva José María Alvira.
Y es que la Comisión de Educación del Senado, con mayoría del PP, rechazó las enmiendas de UPN que promovían una mayor seguridad jurídica en los conciertos educativos, así como el mantenimiento de los mismos en las nuevas enseñanzas establecidas en la LOMCE, enmienda totalmente compartida por EC.
“Este rechazo supone para la escuela concertada católica una enorme decepción por cuanto se pierde la oportunidad de lograr una mejor regulación y la viabilidad futura del régimen de conciertos en aspectos como la renovación automática mientras se acredite demanda social, el reconocimiento de los derechos del titular del centro frente a la administración, el concepto de servicio educativo como servicio público y social, la complementariedad de las redes pública y concertada y la mayor duración de los conciertos”, afirma EC a través de un comunicado.
Dicho esto, pide al Gobierno y al PP que subsanen “estas lagunas” en los desarrollos legislativos.
En el nº 2.873 de Vida Nueva.
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