“El diálogo debe ser nuestro modo de vida y de misión”

católicos en Vietnam rezando en una iglesia

Llamamiento de los obispos asiáticos en su última Plenaria de diciembre

católicos en Vietnam rezando en una iglesia

J. L. CELADA | Los obispos asiáticos insisten en el diálogo como estilo de vida y de misión, e invitan a los católicos del continente a no esconderse si son llamados a dar testimonio de su fe. Así lo ponen de manifiesto en el mensaje final de la 10ª Asamblea Plenaria de la Federación de Conferencias Episcopales Católicas de Asia (FABC), celebrada el pasado mes de diciembre en Vietnam, y que acaba de ser publicado en la web de este organismo.

Más de un centenar de participantes (siete cardenales, 69 obispos, 35 sacerdotes, religiosos y laicos), reunidos en Xuân Lôc (Saigón), reflexionaron sobre “la espiritualidad” de la nueva evangelización, siguiendo las reflexiones del Sínodo de los Obispos sobre el mismo tema que tuvo lugar en octubre en Roma. En este sentido, los representantes de la FABC llaman a cada cristiano asiático a renovar su “espíritu misionero”, así como “la audacia de la fe y del martirio”.

Para ello, insisten especialmente en la importancia de la comunión “en medio de las tensiones crecientes y los conflictos” que vive Asia. “Todos los miembros de la Iglesia –clero y laicos, hombres y mujeres, jóvenes y niños– están llamados a ser misioneros, heraldos del Evangelio, obreros de paz e instrumentos de comunión. Y esta comunión debe expresarse de manera fuerte y viva en nuestras comunidades, parroquias y diócesis”, señala el citado mensaje de la FABC.

Los prelados del continente abogan también por el “espíritu de diálogo que debe guiar la vida cotidiana y orientar las relaciones con los demás hacia el entendimiento y no la oposición”. Este diálogo “se caracteriza por el reconocimiento humilde de la presencia escondida de Dios en las luchas de los pobres, la riqueza de las diferentes culturas de los pueblos, la diversidad de tradiciones religiosas y las profundidades del corazón humano”. “Este diálogo –añade el texto– debe ser nuestro modo de vida y de misión”.

Solidaridad con las víctimas

La FABC insta a los fieles, asimismo, a la solidaridad con las víctimas “de la globalización, de la injusticia, de los desastres naturales y nucleares, y de los ataques de terroristas y extremistas de todo tipo”.

Por último, expresa su preocupación ante “los atentados siempre en aumento contra la creación, cometidos en nombre de intereses económicos y financieros, de manera egoísta e irresponsable”, y anima a los cristianos a no ocultarse “si hoy somos llamados a testimoniar nuestra fe por el sacrificio supremo”. “Jesús nos advirtió –recuerda el mensaje– que ese sacrificio era la última prueba de nuestra fidelidad total a Él y a su misión”.

Entre los asistentes a la Plenaria, figuraban el cardenal filipino Gaudencio Rosales, enviado especial del Papa; el secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, Savio Hon Tai-Fai; así como delegados de las conferencias episcopales de Oceanía, América Latina y Europa. Fundada hace 40 años, la FABC reúne hoy a 19 conferencias episcopales de Asia, un continente en el que los cristianos apenas superan el 3% de su población.

En el nº 2.830 de Vida Nueva.

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