(Vida Nueva) Declaración Pastoral sobre la Participación de los Laicos en Política y Paz. Así se titula el documento que los obispos filipinos emitieron el 13 de julio apelando a “los que son competentes, personas con integridad” y que se han implicado “directamente en el sistema de política de partidos” y son candidatos para las elecciones de 2010, para que recuerden sus “derechos y deberes”: deben prestar “un servicio público competente, honesto y en orden a reformar nuestro país”. Por su parte, la Iglesia se compromete a esforzarse por vigilar que las elecciones sean un proceso “honesto y limpio”.
En la declaración, los obispos señalan que éste es un momento “inquietante” y de “no-paz” fruto de una “cultura de violencia y muerte”, bombardeos, secuestros y extorsiones en Mindanao, al sur del país. También citan la muertes inexplicadas de líderes campesinos y periodistas.
Responsabilizan, en primer lugar, al Gobierno, que debería aplicar la justicia a los que lesionan los derechos humanos fundamentales, y piden a la población que no ignore la violencia y los abusos.
“Pedimos a todos que sigan el camino de la paz… el camino del diálogo y la franqueza… el arrepentimiento, el perdón y la reconciliación”.
En el nº 2.669 de Vida Nueva.
