El santuario de Lourdes acoge una peregrinación de personas que han intentado suicidarse

Una peregrinación de prevención se ofrece como lugar seguro para quienes viven estos impulsos en soledad

El santuario francés de Lourdes ha acogido del 23 al 27 de agosto la Peregrinación Nacional para la Prevención del Suicidio. Un espacio seguro para la experiencia espiritual que busca ofrecer un lugar de descanso a quienes luchan solas contra la tentación de la muerte, según recoge el diario La Croix. Unos 40 peregrinos han participado en esta iniciativa unidos por vivir el suicidio como un pensamiento obsesivo o han tenido alguna ocasión en la que quitarse la vida.



Buscar la luz

Junto a los peregrinos, diez personas participan en la peregrinación como “ángeles de la guarda” que acompañan y velan por la estancia de los participantes. “Estoy con alguien unos días y voy a su ritmo. Si no le apetece ir a misa, no vamos”, señala Béatrice, una de las voluntarias. “Este tiempo nos da un respiro”, señala Lalye Lafitte, una de las coordinadoras de la peregrinación ya que “en el día a día, no tienes un ángel de la guarda; es una batalla que a menudo tienes que librar solo”.

“En mi círculo de amigos y familiares, no encuentro a nadie con quien hablar del sufrimiento que siento, me dicen que ‘vaya más a menudo a la iglesia’ o que ‘rece’”, señala uno de los participantes que participa en las eucaristías, las oraciones, las charlas o los momentos de convivencia… Uno de los sacerdotes, Nicolas Souchu, decía a los peregrinos: “La gruta está orientada al norte, por lo que nunca hay sol en su interior. Y, sin embargo, es desde aquí desde donde venimos a buscar la luz, porque es un lugar donde la vida ha vencido a la muerte”. “Sabía que esta peregrinación iba a ser dolorosa, que iba a perder mucha agua. Pero aquí puedo derramar mi alma porque en la gruta hay un manantial, un manantial vivo”, confiesa una peregrina que participa tras el suicidio de su madre.

Noticias relacionadas
Compartir