Los obispos cuestionan la toma de partido de Novell ante el 27-S

El prelado de Solsona pidió en una carta pastoral que se votase a los secesionistas

banderas de España, Cataluña y estelada independentista en Cataluña ante las elecciones autonómicas 27-S 27 de septiembre

Los obispos cuestionan la toma de partido de Novell ante el 27-S [extracto]

JOSÉ LORENZO | Los resultados que arrojan las elecciones autonómicas catalanas del 27 de septiembre, donde el bloque partidario de la secesión cosechó la mayoría de escaños (72 frente a 63), aunque no de votos (51,7% frente al 47,8%), confirman, según obispos consultados por Vida Nueva, las intuiciones que ya tenían: “Hay una profunda y extensa división de opiniones en Cataluña sobre la independencia”. Pero también que “los datos reflejan el cansancio de que el Estado no mueva ficha. Eso es lo que querría una parte de los votantes de Junts pel Sí. Pero si de aquí a un mes convocasen un referéndum, no lo ganarían de ninguna manera”, afirma otro obispo catalán, quien también apunta rápidamente que “el ambiente social es más pacífico de lo que indican estos datos electorales”.

Con respecto al futuro inmediato que se abre en Cataluña, “la Iglesia tiene que ser mediadora y tender puentes entre los diferentes grupos para buscar la racionabilidad de todo esto”, indica un pastor. “Tendríamos que defender que los procedimientos fueran realmente morales, honrados y limpios”, señala otro, porque “no se pueden establecer procedimientos de engaño, interpretación o falsificación de la realidad o de la historia. Hemos de destapar los posibles engaños que pueda haber, aunque nos juguemos el buen nombre. Evangélicamente, nos debemos de mantener en este terreno”.

Xavier Novell, en una reunión de la Conferencia Episcopal Tarraconense

Hasta ahora, los obispos catalanes habían mantenido una postura común, basada “en la colegialidad y el discernimiento moral”, que, “por sorpresa,” se rompió el viernes 24 con un pronunciamiento del obispo de Solsona, Xavier Novell, en el que pedía el voto a favor de la independencia. “No fue una ruptura de la comunión, aunque su postura no favorece el trabajo en común de los obispos en esta cuestión”, señala uno de los consultados. De hecho, el cardenal de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, modificó a última hora su homilía en la solemnidad de la Madre de Dios de la Merced para introducir un párrafo textual de la nota aprobada por unanimidad el 7 de septiembre, donde se recuerda “la legitimidad moral de todas las opciones políticas que se basan en el respeto a la dignidad de las personas”.

“Somos muy críticos con la actitud de Novell, que no es la del episcopado catalán, que nunca se ha inmiscuido en ninguna campaña electoral. Su proceder, que le lleva a romper puentes, supone un descrédito para él. Tampoco gusta en el Vaticano, donde seguro que se hablará de esto, y en donde nos habían mostrado su contento por la manera en la que los obispos catalanes estábamos tratando este tema. Siempre nos han pedido que fuésemos unidos, y lo estábamos logrando…”, afirma un prelado que no oculta su enfado y disgusto.

“Entiendo que cualquiera, en un momento dado, pueda tener un patinazo con unas declaraciones que hace a la prensa, pero es que esto está por escrito y en una hoja pastoral que sale el domingo de las elecciones…”. “Es una postura –dice otro pastor– que sintoniza más con una tradición decimonónica de un independentismo muy confesional. Pero, fuera de este obispo, todos los demás estamos en que la del independentismo es una cuestión que está fuera de la responsabilidad moral de la jerarquía”.

Molestos con Cañizares

Pero si ha molestado la actitud del joven obispo de Solsona, tampoco han gustado la “vigilia de oración por España y su unidad” que convocó arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, en todas las parroquias valencianas el día que se cerraba la campaña electoral. “Ha sido esperpéntico y no nos ayuda a los obispos catalanes en nuestra misión”, señala uno de ellos. “No parece que sea el momento de hacer esos gestos de defender como un absoluto el valor moral de la unidad de España. Uno puede pensar que eso sea bueno, pero no pensarlo como un valor absoluto y, además, para contraponerlo a otros”, subraya otro.

También coinciden en diferenciar esta actuación del purpurado valenciano con la del presidente y vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ricardo Blázquez y Carlos Osoro, respectivamente. “Han sido muy sensatos, han respetado nuestro discernimiento y no han echado leña al fuego. Es una actitud, por otro lado, que responde a la mayoría actual del episcopado”. “Es una pena que de esta línea se haya desmarcado Cañizares”, apunta otro, “porque desde la CEE, que han estado en contacto con nosotros, ha habido mucha prudencia y nos han dado su apoyado”.

Al cierre de esta edición aún no había concluido la reunión de la Comisión Permanente de la CEE, reunida en Madrid. Aunque no estaba previsto abordar estas intervenciones, sí que se comentaron en los pasillos. También del intento del cardenal Cañizares de, en una reunión anterior, proponer que la CEE reflexionase sobre la situación política de España y Cataluña, algo que no se contempló, remitiéndose a la instrucción pastoral de 2006, Orientaciones morales ante la situación actual de España, de la que él fue uno de sus grandes valedores.

“Los feligreses se emocionaron al oír repicar las campanas”

R. CRUZ | Los que están de acuerdo con Xavier Novell en Solsona creen que su obispo ha hecho lo correcto al lanzarse a la piscina por Junts pel Sí. Los demás: no saben, no contestan. Prima el silencio entre feligreses y párrocos que pertenecen a la diócesis. “De eso es mejor no hablar”, dice uno de estos curas. Por su parte, el sacerdote Alfonso Busto, natural de Burgos, cierra filas en torno a su obispo.

“En las tres iglesias donde oficio misa, repicaron las campanas tanto el 27 de septiembre como en la Diada”, dijo a esta revista. Pero, ¿ningún feligrés se ha molestado porque pueda pensar que su pastor lo es, en definitiva, solo de un “bando”?. “Nadie me ha mostrado su desacuerdo. Todo lo contrario: mis feligreses me han parado por la calle para decirme que se emocionaron mucho cuando oyeron las campanas repicando”, cuenta Busto. Sí, esas campanas que repicaban por “la libertad de Cataluña”, como recogía Novell en su pastoral. No obstante, sí es verdad que el sacerdote se extraña de que otros feligreses que sí se sienten españoles no se quejaran: “Hay gente del Partido Popular o de Unió también, pero no han dicho nada, no sé si porque no se atreven a arremeter contra un estamento clerical…”.

Por otro lado, José Reboiro, presidente del Partido Popular en Solsona, ha asegurado a Vida Nueva que la curia no debería entrar a valorar ninguna opción política. “Su trabajo es transmitir la Palabra del Señor, nada más. Se puede equivocar, porque somos personas, pero tiene que darse cuenta de que es pastor de todos”, indicó. En torno al 65% de la población de los municipios a los que se circunscribe la diócesis ha votado a la coalición secesionista. ¿Se considera pastor también del otro 35%? Este semanario ha intentado preguntárselo sin éxito: “El obispo ya ha dicho todo lo que tenía que decir”, advierte la responsable de comunicación de Solsona.

En el nº 2.958 de Vida Nueva.