Lo religioso y su espacio en la sociedad

conferencia internacional Universidad de Deusto 2013

La Universidad de Deusto acoge una conferencia internacional sobre ‘Espacios de confrontación, ¿terreno común?’

conferencia internacional Universidad de Deusto 2013

A la izq., Eduardo J. Ruiz

VICENTE L. GARCÍA. VITORIA | Del 10 al 13 de abril, la Universidad de Deusto, en Bilbao, acogió la conferencia Espacios de confrontación, ¿terreno común?, organizada por la European Society for Intercultural Theology and Interreligious Studies (Esitis). Fueron muchas las intervenciones que analizaron el espacio de lo religioso en cada sociedad, así como la lucha entre las religiones para ocuparlo. Por ejemplo, la de la profesora de la Universidad de Lancaster, Kim Knott, que abordó la demanda de espacio en sus acepciones física, social y discursiva.

Durante las reflexiones se abordaron, además, los flujos migratorios, porque juegan un papel importante, y la demanda de espacios propios en los lugares de destino, pues son fuente de conflicto y de debate social. De hecho, se habló de la ordenanza del Ayuntamiento de Bilbao, que dificultaría la apertura de nuevos centros de culto.

Por su parte, el director del Instituto de Derechos Humanos de Deusto, Eduardo J. Ruiz Vieytez, habló de la trascendencia de los espacios físicos de culto y encuentro que van más allá de los fines para los que fueron creados: “Desarrollan funciones simbólicas e identitarias de primer nivel. Cuando las funciones primarias de los mismos guardan a su vez relación con marcadores fuertes de identidad, como es el caso de la religión, dicho simbolismo se acentúa y se convierten en objeto de debate político”.

La realidad del País Vasco fue analizada por José Luis Villacorta Núñez, profesor en la Facultad de Teología y Antropología de la Universidad de Deusto, quien dijo que “vivimos inmersos en una sociedad que reclama el diálogo también en el ámbito cultural y religioso”.

“Debemos ser conscientes de que la sociedad vasca es altamente secular y la sensibilidad por lo religioso no está ampliamente desarrollada, aunque tampoco está atrofiada. Hay que crear dinámicas sociales que hagan visible todo lo que se realiza en ámbitos minoritarios, porque todo ello tiene el objetivo saludable de crear una sociedad transparente, intercomunicada y solidaria”, añadió.

Silvia Martínez Cano, doctora en Educación por la Universidad Complutense de Madrid, licenciada en Teología por la Universidad Pontificia Comillas y arquitecta técnica, habló de la arquitectura y su importancia como centro de la vida comunitaria: “La vida comunitaria es la vertebradora de los espacios, sus usos y significados. Los espacios sagrado y profano interactúan sin dejar del todo definidas sus fronteras, permitiendo a la comunidad creyente integrar la cotidianeidad en su relación con Dios y dejar actuar a Dios en el curso de la historia”.

En el nº 2.844 de Vida Nueva.

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