J. L. CELADA | Según información facilitada por IVICON, la agencia de noticias de la Vida Consagrada en España, el pasado 19 de octubre fueron secuestrados en la región de Kivu Norte (República Democrática del Congo) los asuncionistas congoleños Jean-Pierre Ndulani, Alselme Wasukundi y Edmond Kisughu, tras la irrupción en su comunidad de un grupo de desconocidos.
Un cuarto religioso pudo escuchar todo lo sucedido desde su habitación, donde fue encerrado, aunque cuando logró salir, ya no encontró a sus hermanos.
El rapto tuvo lugar en la parroquia que los Agustinos de la Asunción tienen en Mbau, al norte de Butembo, “una zona donde hay varios grupos armados que cometen actos de bandidaje de este tipo”, reveló el obispo de Butembo-Beni (diócesis al este del país africano), Melquisedec Sikuli Paluku, en declaraciones a la agencia Fides. “Tenemos varias pistas a seguir para llegar a encontrar a los tres religiosos secuestrados; necesitamos averiguar cuál es la correcta”, ha dicho el prelado.
Mientras, ha pedido a los fieles “que oren para que Dios toque los corazones de los secuestradores y liberen a nuestros padres”. Sikuli Paluku ha llamado a “la movilización general, no solo de la policía y otras fuerzas de seguridad, sino de la población de la zona, para que nos facilite información sobre los movimientos de los secuestradores”. Todo ello con la esperanza de “obtener información más precisa” que conduzca lo antes posible a la liberación de los secuestrados.
En el nº 2.821 de Vida Nueva.
