La Universidad Católica Argentina (UCA) presentó el segundo informe del Barómetro del Narcotráfico y las Adicciones –se puede acceder en www.uca.edu.ar– y demostró un aumento “exponencial” en los últimos años de la proporción de hogares que percibe de manera directa que en su barrio se venden drogas ilegales, sobre todo en aquellos con situaciones de vulnerabilidad social.
El rector de la UCA, Víctor Manuel Fernández, destacó que el objetivo del estudio “es colaborar con cualquier gobierno para saldar esta deuda social y no sólo indicarla”.
Por su parte, Agustín Salvia, investigador jefe del Observatorio de la Deuda Social Argentina, advirtió que la Argentina es un país de “consumo, fabricación y tránsito” de drogas. Luego
detalló que la evolución del registro de venta de drogas en los barrios pasó del 30% en 2010 al 45% de los hogares en 2014, y que al discriminar los períodos el porcentual asciende al 34% en 2010-2011 y al 44% en 2013-2014.
Asimismo, precisó que los hogares en las regiones urbanas de mayor concentración de población y también en las que conforman el norte del país son “los que presentan niveles más altos de registro de venta de drogas ilegales en su barrio”.
En consonancia con este barómetro, un día después, Néstor Dos Santos, párroco de San Luis Rey, en la provincia de Formosa, denunció a la prensa: “prácticamente en todos los barrios de la ciudad de Formosa la droga es una realidad que está instalada. A veces en los medios se reduce a un tema, pero la droga es una realidad que está afectando a adolescentes y jóvenes, sobre todo en los estratos sociales más humildes”.
NICOLÁS MIRABET
