Se trata del primer viaje del papa Bergoglio, donde pasará toda la mañana
ANTONIO PELAYO, corresponsal de Vida Nueva en ROMA | La isla de Lampedusa, situada entre Italia y las costas de Libia, será el destino del primer viaje de Francisco. Tendrá lugar este lunes 8 de julio y durará cinco o seis horas. La isla es bien conocida como lugar de llegada cada año de miles de inmigrantes provenientes sobre todo del continente africano; por desgracia, en no pocas ocasiones las pateras o gomones en los que estos viajan sufren averías y se producen víctimas.
No hay, lógicamente, cifras exactas, pero la guardia costera y la policía italianas calculan que este trazo del mar se traga anualmente a varios centenares de vidas humanas, no pocas veces niños de corta edad.
El Papa quiere, así, recordar a esos muertos y manifestar su agradecimiento a la población de Lampedusa, que afronta cada año con dignidad y solidaridad semejante reto humanitario.
Francisco llegará en avión poco después de las nueve de la mañana y se trasladará inmediatamente a la costa, donde embarcará en una nave que será acompañada por decenas de barcos de pescadores; una vez mar adentro, lanzará una corona de flores en honor de las víctimas de los naufragios y rezará una oración por sus almas.
En el muelle del puerto se encontrará, a continuación, con varios centenares de emigrantes y después celebrará la Misa en un estadio antes de regresar a Roma, donde aterrizará en torno a las dos del mediodía.