Editorial

No repetir errores

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EDITORIAL VIDA NUEVA | Ya está más que dicho, y se ha reforzado con medidas preventivas y punitivas: la Iglesia actuará con tolerancia cero ante los abusos sexuales.

Se acabó el silencio cómplice, la impunidad, el mirar a otro lado, el persistir en el pecado y en el delito para no ser piedra de escándalo. Sin embargo, aunque la letra es clara, también clara ha de ser la voluntad de los pastores, que pasa no solo por poner vendas, sino por prevenir que se produzcan esas heridas en el cuerpo eclesial. Con ese fin, nuestro A Fondo recuerda los pasos que deben darse, tanto para la prevención, denuncia y búsqueda de la verdad como para el acompañamiento a la víctima y la petición de perdón. Todos juntos llevan a la verdadera sanación del mal realizado.

En el nº 2.920 de Vida Nueva

 

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