El portavoz Lombardi explica los detalles de la visita que comienza el lunes
MARÍA GÓMEZ | “Estamos todos muy emocionados por este gran viaje de Francisco”. Lo ha dicho Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede, a propósito de la visita del Papa a Brasil del 22 al 28 de julio para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Río. Se trata del primer viaje internacional de este pontificado, “particularmente significativo” por realizarse “en su continente”, lo que le otorga “un tono especial en lo que respecta a las expectativas y a la participación”.
El P. Lombardi ha mantenido hoy en el Vaticano un briefing para informar sobre el viaje que comenzará el próximo lunes, y que resumimos a continuación en forma de ocho claves para comprender su dimensión:
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El programa de Benedicto XVI, pero con cambios
Al realizar este viaje, Francisco retoma el legado de Benedicto XVI, que fue el que convocó esta nueva edición de la JMJ en Río de Janeiro. Pero es verdad que el programa se ha “adaptado” a Bergoglio: “Digamos que se ha intensificado y enriquecido con eventos adicionales”, ha explicado Lombardi.
“El proyecto preparado para Benedicto XVI era más ligero y, en cambio, con Francisco se han añadido algunas cosas, como por ejemplo, la peregrinación al santuario de Aparecida, la visita a la favela de Varginha (Manguinhos), al hospital de San Francisco de Asís de la Providencia o la reunión con el Comité de CELAM. Son actos que no formaban parte del calendario del primer proyecto del viaje, hecho más a medida de Benedicto XVI”.
Además, se ha provocado una curiosa coincidencia entre ambos pontífices: el primer viaje internacional de Benedicto XVI fue a Colonia (en su Alemania natal), para participar en la JMJ 2005 que había convocado Juan Pablo II. Ahora es el argentio Bergoglio el que viaja al continente americano en su primera visita fuera de Italia. “No ha sido él quien ha decidido hacer su primer viaje a América, pero al confirmar su presencia se ha dado un simpático paralelismo”.
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Brasil, destino de tres papas
Juan Pablo II estuvo cuatro veces en Brasil: tres veces fue destino de una visita, y en una cuarta ocasión, fue etapa de un viaje a Argentina. Benedicto XVI estuvo allí una vez, en 2007, con motivo de la inauguración de la V Conferencia General del CELAM en Aparecida y la canonización de San Frei Galvão. Francisco será el tercer pontífice que visita el país.
Voluntarios ultiman detalles en Río
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Invitación de autoridades religiosas y civiles
Francisco viaja a Brasil invitado por los obispos organizadores y promotores de la Jornada Mundial de la Juventud, es decir, monseñor Orani João Tempesta (arzobispo de Río de Janeiro) y el cardenal Raymundo Damasceno Assis, presidente de la Conferencia Nacional de Obispos Católicos de Brasil.
De igual manera, la presidenta de la República, Dilma Roussef, invitó explícitamente a Bergoglio a su país cuando estuvo en el Vaticano en la inauguración del pontificado, el pasado 19 de marzo.
“El Papa confirmó inmediatamente, pocos días después de su elección, que haría este viaje para participar en la JMJ, lo cual ha permitido a toda la organización trabajar rápidamente y sin incertidumbres”, ha explicado Lombardi.
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El Papa no podía faltar
Tal y como ha recordado el portavoz ante los periodistas, la idea de la Jornada Mundial de la Juventud nació durante el pontificado del beato Juan Pablo II: “Son encuentros de la juventud de todo el mundo con el Papa. Así que no se puede pensar en la JMJ sin la presencia del Papa. Es uno de los elementos fundamentales de este evento”.
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Sin miedo a las protestas sociales
Hace unas semanas, con motivo de la celebración en Brasil de la Copa Confederaciones de Fútbol, multitud de colectivos y asociaciones civiles y muchos jóvenes a título individual marcharon en muchas ciudades contra las políticas económicas del país. Pero el Vaticano confía en que no habrá problemas en este sentido.
“Muchos se preguntarán si también habrá protestas con ocasión de la visita del Papa: lo veremos”, ha dicho Lombardi. “Nosotros tenemos total confianza, como siempre, también en la capacidad por parte de las autoridades de administrar bien y autorizadamente las situaciones, y por lo tanto vamos con total serenidad, sabiendo que estas manifestaciones no tienen nada específico respecto al Papa y de la Iglesia”.
La Cruz de la JMJ está peregrinando estos días por la ciudad de Río
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Quién formará el séquito papal
El portavoz ha detallado quiénes van a ser algunas de las personas que formarán parte del séquito que acompañará al Papa. En el avión, que saldrá de Roma-Ciampino el lunes a las 8:45 h., viajarán con él el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado; Angelo Becciu, sustituto de la Secretaría de Estado; el cardenal Marc Ouellet, prefecto de la Congregación para los Obispos y presidente de la Comisión para América Latina; y el cardenal João Braz de Aviz, prefecto de la Cognreación para la Vida Consagrada, que actualmente es el único purpurado brasileño en la Curia.
Les acompañarán otros miembros habituales del séquito, como ceremonieros, encargados de las comunicaciones, responsables de la Gendarmería vaticana y de la Guardia Suiza, etc., y también médicos.
Y en Brasil se unirán varias personas más: el cardenal Raymundo Damasceno Assis, presidente del Episcopado brasileño; Orani João Tempesta, arzobispo de Río; el cardenal Stanislaw Rylko, presidente del Pontificio Consejo para los Laicos; monseñor Jozef Clemens, responsable de la JMJ por parte de la Curia; y Giovanni d’Aniello, nuncio apostólico en Brasil, y sus colaboradores más estrechos.
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Sobre el coloquio con los periodistas… y hablará en español
Era habitual que, durante el vuelo, el Papa mantuviera un encuentro con los periodistas de diversos medios que viajan con él. Lombardi ha puntualizado que, esta vez, no se va a seguir el tradicional modelo de pregunta-respuesta: “Será, realmente, un bello encuentro, amplio y cordial, pero no con la fórmula de la entrevista preparada”. En la práctica, se traducirá en que sí, Francisco quiere hablar y saludará personalmente a cada uno de los periodistas, pero esas conversaciones no deberán ser tomadas como declaraciones públicas del Papa, ni menos aún exclusivas.
En total, está previsto que Francisco pronuncie 15 discursos, incluidas las homilías y saludos, durante su estancia en Brasil. Y lo hará en portugués (el idioma oficial) y en español: “El Papa en español se siente en casa, evidentemente. Muchas personas lo entienden en América Latina, e incluso es posible que lo quiera hablar espontáneamente o que haga intervenciones en esta lengua que conoce mejor”.
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Francisco: “Todos somos jóvenes de corazón”
“Todos somos jóvenes de corazón”. Con estas palabras fue como terminó el papa Francisco el rezo mariano el pasado domingo. El Pontífice encomendó a la intercesión de la Virgen a todos los peregrinos que se reunirán con él en Brasil para celebrar la JMJ.
“Que Nuestra Señora de Aparecida, patrona de Brasil, guíe los pasos de los participantes, y abra sus corazones para aceptar la misión que Cristo les dará”, añadió.
