Reconocer la dignidad de la persona desde la concepción

Salamanca y la UPSA celebran las Jornadas Vida y Familia

pareja-con-ninos(F. T.– Salamanca) La Delegación Diocesana de Familia y Vida de la Diócesis de Salamanca, en colaboración con el Instituto Superior de Ciencias de la Familia de la Universidad Pontificia de Salamanca, organizó del 4 al 10 de mayo unas Jornadas sobre  Vida y Familia. Las intervenciones tuvieron como fundamento que “a cada ser humano, desde la concepción hasta la muerte natural, se le debe reconocer la dignidad de persona. Este principio fundamental, que expresa un gran sí a la vida humana, debe ocupar un lugar central en la reflexión ética sobre la investigación biomédica que reviste una gran importancia, siempre mayor en el mundo de hoy”. 

El obispo Carlos López Hernández presidió los actos celebrados en el Auditorio de Calatrava con la asistencia de un buen número de participantes. El día 4, la conferencia estuvo a cargo de César Nombela, catedrático de Microbiología de la Universidad Complutense de Madrid, que abordó El valor de la vida humana. El profesor es uno de los signatarios del llamado Manifiesto de Madrid, un documento suscrito por más de 2.000 científicos, académicos e intelectuales que se remiten a la evidencia científica para dejar claro que la vida empieza en el momento de la fecundación. El martes día 5, José-Román Flecha, catedrático de Teología Moral de la Universidad Pontificia de Salamanca, abordó en su intervención el tema Protege la vida, es don y derecho. Así, recordó que el cometido de proteger la vida desde la fecundación hasta la muerte natural es un don y un derecho de toda persona. 

Al día siguiente fue el turno de Luis González Morán, quien centró su intervención –La Vida Humana ¿quién la defiende?– en el derecho a la vida y señaló que es el primero y más fundamental de los derechos humanos. 

Ya el jueves 7, la conferencia El servicio a la vida y a la familia fue expuesta por Fernando Simón Rueda, secretario de la Subcomisión Episcopal de la Familia, a partir del Magisterio de la Iglesia Universal y de la Conferencia Episcopal Española. El día 8 se celebró una mesa redonda moderada por Santiago Bautista Martín, filólogo, con la participación de Ángel Galindo, catedrático de Moral Social y director del Instituto Superior de Ciencias de la Familia de la UPSA, el cual precisó que la verdadera justicia consiste en proteger la vida de quien va a nacer y en ayudar a las madres que se encuentran en dificultades.  

El profesor Tomás González Blázquez trató el tema de la medicina en la familia, y Luz María Fernández, también docente, explicó la dimensión psicológica de la familia. Por último, Franca Tonini, coordinadora del Centro de Orientación Familiar, presentó la metodología de intervención frente a una “maternidad inesperada”, teniendo en cuenta que la vida es un derecho sagrado y un don siempre. 

El sábado 9 de mayo tuvo lugar una marcha por la vida y la familia en la localidad de Fuenterroble de Salvatierra, mientras que el domingo se celebró una eucaristía en la catedral. 

En el nº 2.661 de Vida Nueva.

Compartir