Francisco ha decidido constituir como obra pontificia a la Red Mundial de Oración del Papa, confiándola en las manos de la Compañía de Jesús.
La Red Mundial, que nace con la misión de “orar y vivir los desafíos de la humanidad y de la Iglesia que preocupan al Santo Padre”, fue fundada en 1844, está presente en 98 países y ha contado con la adición del Movimiento Eucarístico Juvenil, rama de jóvenes de la Red Mundial.