La CONFER celebra mañana una nueva cumbre antiabusos

Los superiores mayores se reunirán para “revisar el pasado” pero también para “evitar” nuevos casos “en el presente y el futuro” e “ir al unísono con mucha responsabilidad, determinación y decisión”

La Conferencia Española de Religiosos (CONFER) considera que “inevitablemente” hay que hacer “una revisión del pasado” sobre los casos de abusos sexuales en las congregaciones religiosas. Así lo ha afirmado a Europa Press el presidente de la institución, Jesús Díaz Sariego, quien ha adelantado que mañana, 27 de enero, celebrarán una reunión de todos los superiores mayores especialmente afectados por esta situación para proceder en conjunto, coordinarnos y así poder responder más y mejor a esa demanda social”.



“No solo nos preocupa una revisión del pasado, que inevitablemente hay que hacer, con las limitaciones que tiene volver hacia el pasado, sobre todo cuando son muchos años de distancia, pero sí nos preocupa especialmente lo proactivo, ser activos, procurar una adecuada formación“, ha subrayado el presidente de la CONFER.

A partir del informe con 251 casos enviado al Vaticano por el diario El País, la CONFER ha recibido, por parte de la Conferencia Episcopal, aquellos que afectan a congregaciones religiosas. Por este motivo, este jueves se reunirán los superiores mayores de las congregaciones afectadas para hablar sobre “revisar el pasado” pero también “evitar” nuevos casos “en el presente y el futuro” e “ir al unísono con mucha responsabilidad, determinación y decisión”.

“Dar valor a las víctimas”

Una vez recibieron los informes, desde la CONFER “inmediatamente nos hemos puesto manos a la obra, ha habido mucha disponibilidad por parte de los superiores mayores de las diversas congregaciones”, ha asegurado Díaz Sariego. Asimismo, ha añadido que se lo han “tomado en serio” porque es “una experiencia muy dolorosa” y, al mismo tiempo, quieren ser “muy responsables” y “dar valor a las posibles víctimas a lo largo de muchos años”.

Por otro lado, Díaz Sariego ha señalado que el hecho de que los casos se remonten mucho tiempo atrás supone “una dificultad” a la hora de “hacer las investigaciones pertinentes”. En todo caso, ha afirmado que están en ese proceso y en el de “intentar ver la situación de las posibles víctimas”.

“Dentro de la dureza que todo esto tiene, es duro porque las personas han sufrido mucho y cuando una persona sufre hay ser muy atentos a eso y a las causas, eso claro que nos preocupa, pero también el evitarlo y erradicarlo hacia el futuro”, ha aseverado el religioso.

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