Tribuna

¿No sabes a quién recurrir? ¡Acude a santa Rita!

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Algunas veces nos sentimos como si estuviéramos paralizados o bloqueados, sin encontrar salida a nuestros problemas de índole personal, espiritual, económico, laboral, familiar… Si tal es el caso, recordemos lo que narra el evangelio de Juan sobre el paralítico de Siloé: se dice que los enfermos esperaban que el agua de la piscina se removiera, por obra de un ángel, para que el primer enfermo que se sumergiera en el agua fuera curado.



Y precisamente, entre los muchos enfermos que acudían al lugar, se encontraba un paralítico que llevaba 38 años esperando su momento. Al verlo, Jesús se conmovió y le preguntó si quería ser curado. La respuesta parecía obvia, pues la razón por la que el hombre se encontraba allí esperando por tanto tiempo era su sanidad, así que sin dudarlo le respondió diciendo: “Señor, no tengo un hombre que me introduzca en la piscina cuando se mueve el agua; mientras voy, desciende otro antes que yo”. Sin duda alguna, se trataba de un hombre sin esperanza, que conocía la solución, pero no podía acceder a ella. Así que, ante su respuesta tan sincera, Jesús le dijo: “Levántate, toma tu camilla, y anda”. Y al instante aquel hombre fue sanado…

A decir verdad, este pasaje nos recuerda que Jesús, el Señor, es capaz de realizar curaciones imposibles en apariencia, e incluso, muchas veces utiliza mediadores para lograrlo, como se puede ver en los Hechos de los Apóstoles con el tullido de nacimiento. “Pedro le dijo: «No tengo plata ni oro; pero lo que tengo, te doy: en nombre de Jesucristo, el Nazareno, ponte a andar» Y tomándole de la mano derecha le levantó. Al instante cobraron fuerza sus pies y tobillos”. Esto también nos recuerda que los santos saben que no son ellos los que actúan, ni los que utilizan sus fuerzas para sanar, sino que solo son mediadores para hacer que se produzcan milagros en la tierra.

Por cierto, hay una figura destacada en la Iglesia conocida por acudir en casos urgentes y desesperados: se trata de una religiosa italiana llamada Santa Rita de Casia, patrona de los imposibles y de las causas perdidas, quien se considera como una gran intercesora ante Dios, para ayudarnos cuando no vemos salida o no la tenemos a nuestro alcance, como sucedía con el paralítico de Siloé…

Santa Rita

Santa Rita. Foto: Hozana

¿Por qué Santa Rita es patrona de lo imposible?

Sin duda alguna, la vida de esta santa estuvo enmarcada por el sufrimiento y el dolor, en diferentes ámbitos: como mujer, como esposa, como madre, como consagrada, etc., lo cual le permitió cultivar diversas virtudes a lo largo de su vida, las cuales hacen de ella una santa excepcional: recordemos que Santa Rita anhelaba con todo su corazón ser religiosa, pero fue casada a la fuerza con un hombre de muy mal carácter que le ocasionó muchos sufrimientos; sin embargo, ella siempre mantuvo un buen comportamiento con él y rezó por su conversión durante muchos años, orando sin cesar hasta ver el milagro en su esposo después de un largo tiempo de espera. Como si fuera poco, tuvo dos hijos de su matrimonio que murieron muy jóvenes por una enfermedad, lo que evitó que tomaran venganza por el asesinato de su padre… Y fue así como todo este sufrimiento sirvió para forjar su carácter y su confianza en Dios, hasta que finalmente pudo entrar en un convento de agustinas y llevar una vida ejemplar como religiosa durante cuarenta años.

Sin duda alguna, lo que más me sorprende de Santa Rita es que fue marcada por el sufrimiento, incluso en su cuerpo terrenal, al recibir una espina de la corona de Cristo en su frente, la cual se asocia al intenso dolor de Jesús. Aun así, lejos de quejarse o evitar el sufrimiento, ella decidió llevar obedientemente esta bella y dolorosa herida de amor que ofreció por los casos desesperados hasta su muerte, dándonos el más puro ejemplo de una fe que no se rinde ante la prueba y una esperanza que nunca se desanima…

En otras palabras, todas estas dificultades hicieron de Santa Rita una gran experta en el sufrimiento y en las causas imposibles, por lo que muy pronto se hizo popular al atribuírsele diversos milagros después de su muerte. Lo mejor de todo es que ella sigue atenta a las peticiones que se le hacen, especialmente a las causas urgentes y desesperadas. Así que, querido lector, si no sabes a quién recurrir, ¡acude a Santa Rita!

Para darte facilidades Hozana, red social de oración católica, pone a tu alcance de forma gratuita una Novena a Santa Rita: patrona de los imposibles, para que, durante nueve días puedas acercarte a su figura y ver que no hay motivo para la desesperanza.

También puedes confiar tus intenciones en esta página que ha sido especialmente creada para enviar directamente tus peticiones al Santuário de Santa Rita de Cássia (Brasil), reconocido como el santuario más grande del mundo dedicado a esta santa. Puedes participar en la novena, y también dejar tus intenciones en línea, desde cualquier lugar del mundo y de manera gratuita, haciendo clic en los enlaces respectivos:

En este enlace para unirse a la novena.

En este enlace para dejar las intenciones que serán llevadas a Brasil.

¡Ánimo, Dios te ama y sabe mejor que tú y que yo lo que te conviene y ha puesto a Santa Rita para apoyarnos en situaciones urgentes, desesperadas e imposibles!

 

*Redactado por Pepe Pérez, del equipo Hozana.

Artículo en colaboración con Hozana.