El equipo de pastoral social de la arquidiócesis de Córdoba se quejó por la falta de diálogo en la búsqueda de la verdad y el bien común, y recordó lo expresado en el art 202 de ‘Fratelli Tutti’: “La falta de diálogo implica que ninguno, en los distintos sectores, está preocupado por el bien común, sino por la adquisición de los beneficios que otorga el poder o, en el mejor de los casos, por imponer su forma de pensar”.

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Por este motivo, hizo una declaración titulada: “Sin diálogo sincero, el fracaso está a la puerta”, en la que manifiesta que uno de los males que aqueja a los argentinos es la poca capacidad para el diálogo respetuoso en la búsqueda del bien común y de la verdad. Asimismo, agradecieron a aquellos dirigentes y referentes que, aún con intereses o miradas diversas, se esfuerzan por lograr un diálogo fecundo.

Aseguraron que cuando está primero el deseo de construir todo diálogo es posible porque las diferencias no cancelan al que piensa distinto. «Agradecemos a quienes, sin dejar de lado las discusiones necesarias, se abstienen de caer en la polarización violenta o en la “cultura de la grieta” por la que algunos parecen apostar como estrategia detrás de un rédito personal o sectorial aun a costa de “sacrificar” a la Patria”», sostuvieron.

Agobio

Los miembros de la comisión también manifestaron que la mayoría de los argentinos están cansados de escuchar cómo los dirigentes se agravian, descalifican, insultan y menosprecian. Creen que a la dura situación del país (inflación, pobreza, indigencia, falta de trabajo, corrupción y violencia) se suma el “espectáculo” lamentable de quienes tienen que dirigir, lo hacen solo por interés propio y no del bien común, lo que lleva a un agobio pesado de sobrellevar. Seguidamente, se preguntaron: ¿Esto nos espera en un año electoral?

Para la pastoral social “causa dolor y profundiza la desesperanza que la violencia verbal y gestual tenga una nueva escalada y que sea provocada por quienes tienen el deber de llevar calma, madurez, y no cansarse nunca de construir el diálogo y la paz social”.

Promover el diálogo

Para que haya un encuentro real se pronunciaron en favor del diálogo, que respete el punto de vista del otro, y acepte la posibilidad de brindar juntos un aporte que ayude a la sociedad.

Los dirigentes y referentes del Estado, de la política, los sindicatos, el empresariado, los movimientos sociales, los líderes religiosos, los comunicadores, todos, tienen tenemos una importante responsabilidad: “procurar no ser portavoces que amplifiquen o difundan expresiones y gestos violentos y soeces que no ayudan a la convivencia social”.

Finalmente, alentaron a no escatimar esfuerzos en promover, sostener y acompañar espacios de diálogo y encuentro social. “¿Podremos esperar de todos nuestros dirigentes, particularmente de los políticos, grandeza, serenidad y responsabilidad cívica? Creemos, trabajamos e invitamos a todos a comprometerse con este fin”, expusieron los miembros de la pastoral social de la arquidiócesis de Córdoba.