La Comunidad Cristiana LGTBI+H CRISMHOM se une a la multitud de personas alrededor del mundo que han celebrado y agradecido el sermón de la obispa episcopal Mariann Edgar Budde, proclamado en la Catedral Nacional de Washington. Este discurso formó parte de los actos organizados al inicio del mandato de Donald Trump, cuadragésimo séptimo presidente de los Estados Unidos.
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La esencia del Evangelio frente al poder
Mariann Edgar Budde demostró, según la comunidad, “un coraje inquebrantable y una coherencia admirable” al proclamar, frente a un presidente que en su toma de posesión había amenazado a los inmigrantes irregulares y a las personas trans, los valores fundamentales del Evangelio. En su mensaje, resaltó que “todos los seres humanos poseen la misma dignidad”, que “las personas más vulnerables son quienes merecen mayores cuidados y protección”, y que “un gobernante nunca debe alimentar discursos de odio que fomentan la división entre la ciudadanía”.
Llamada a la unidad y la misericordia
Desde CRISMHOM han expresado su profundo agradecimiento a la obispa Budde por su valiente llamada a la “unidad en la diversidad”, a la “misericordia, al perdón y a la humildad”. Su determinación de pronunciar estas verdades frente a quien ostenta el poder más grande, y que ha hecho del “desprecio y el insulto hacia los más débiles” una constante en su discurso, es un acto de verdadera fe y compromiso cristiano, tal y como declaran desde la comunidad cristiana.
Agradecimiento y compromiso
CRISMHOM ha mandado una carta de agradecimiento a la obispa con estas palabras: “Gracias, Mariann, por tu testimonio, por tu valentía y por recordarnos a todos que el mensaje del Evangelio es inclusivo y universal”. Y concluyen con su bendición por la causa, “confiando en que tus palabras sigan inspirando a quienes buscan un mundo más justo, igualitario y lleno de amor”.