Definido “como sacerdote, pastor, amigo, músico y poeta”, Pantaleón, destacan los religiosos “supo transmitir un mensaje de fe y esperanza en Cristo, en una misión decidida y firme “por la reconciliación y la justicia”, fiel al carisma ignaciano. Para Jaramillo, “su salida nos llena de tristeza, pero a la vez de gratitud por todo el bien recibido a través de él. En su nueva misión estará profundamente unido al pueblo cubano, tanto en sus alegrías como en sus dolores”. No se ha hecho una comunicación oficial del nuevo destino del religioso.