El obispo mexicano emérito de la Diócesis de Papantla, Lorenzo Cárdenas Aregullin, falleció este 9 de noviembre a los 88 años de edad; es velado en la catedral de Nuestra Señora de la Asunción y sus restos serán inhumados en la capilla del Sagrario Catedral, donde descansarán y posteriormente podrán ser visitados por la comunidad diocesana.
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En un comunicado firmado por el obispo de Papantla, José Trinidad Zapata Ortiz, se hizo un agradecimiento “a Dios, por la vida y el ministerio pastoral que monseñor Lorenzo Cárdenas realizó en nuestra Diócesis de Papantla, dejando una gran huella en la memoria y en el corazón de quienes lo conocieron”.
El obispo Zapata también dio las gracias a todos los feligreses, amigos y familiares por haber acompañado, “en los últimos momentos, con sus oraciones, desde sus lugares de origen o de trabajo, a don Lorenzo Cárdenas Aregullin. En este sentido, podemos decir que se ha ido muy arropado con nuestras oraciones a la ‘Casa de Padre’”.
“Generoso servicio y entrega pastoral”
La Diócesis de Papantla informó que “en homenaje a su trayectoria y legado pastoral y espiritual, su cuerpo está siendo velado en la Santa Iglesia Catedral” desde el 9 de noviembre y la misa de su funeral será el 11 de noviembre a las 11:00 horas; posteriormente, sus restos mortales serán inhumados en la Capilla del Sagrario Catedral, lo cual tiene un profundo sentido y valor espiritual para todos los fieles de esta diócesis que quieran venir a visitarlo posteriormente donde descansarán sus restos mortales”.
El obispo Zapata pidió a santa María del Monte Carmelo y a san Rafael Guízar y Valencia que intercedan ante Dios “por todos los que peregrinamos en esta Diócesis de Papantla”.
En tanto, la Conferencia del Episcopado Mexicano pidió a los fieles elevar “sus oraciones por el eterno descanso del obispo emérito de Papantla, y “manifestamos nuestras condolencias a su familiares, amigos y fieles, a quienes sirvió en vida como su pastor, unidos en la fe y con la confianza puesta en Dios. Rogamos a nuestro Señor Jesucristo, lo reciba y premie con su Reino, por su generoso servicio y entrega pastoral en bien del pueblo encomendado”.
