La Memoria de Pastoral Penitenciaria, presentada en torno a la fiesta de la Merced, detalla la acción religiosa, social y jurídica en prisiones y recursos externos, con una inversión de 2,9 millones de euros
La Memoria de Pastoral Penitenciaria, presentada en torno a la fiesta de la Merced, detalla la acción religiosa, social y jurídica en prisiones y recursos externos, con una inversión de 2,9 millones de euros.
El Departamento de Pastoral Penitenciaria —integrado en la Comisión Episcopal para la Pastoral Social y Promoción Humana— ha publicado su Memoria 2024, el balance anual que la Iglesia en España presenta cada septiembre en torno a la festividad de la Virgen de la Merced (24 de septiembre), patrona de las personas privadas de libertad y de quienes trabajan en prisión. El documento, contrastado por el Departamento de Transparencia y Estadística de la CEE y con el visto bueno de la Secretaría General, busca dar visibilidad pública a la acción eclesial en el ámbito penitenciario.
La Memoria cifra en 2.956.266,68 euros la aportación económica de Pastoral Penitenciaria durante 2024 para programas, materiales, formación y apoyo a las delegaciones.
El informe recoge la actividad desarrollada en la mayoría de centros penitenciarios del país, a partir de datos reales aportados por capellanes, delegaciones diocesanas y la red de voluntariado. Solo dentro de los centros se han puesto en marcha:
En conjunto, 1.051 intervenciones orientadas a la atención espiritual, el acompañamiento social y la defensa de derechos.
La labor continúa en el exterior, con recursos de acompañamiento y reinserción:
Son 186 programas adicionales que sostienen los procesos de retorno a la comunidad.